Todo hecho en Japón: Panthalassa, ganador de la Saudi Cup, un producto entero del turf que se expande y gana en el mundo

Con Yutaka Yoshida en las riendas y entrenado por Yoshito Yahagi, el hijo del padrillo Lord Kanaloa venció sin luz a Country Grammer, al que dirigió Frankie Dettori, y amplía la lista de caballos de ese origen que triunfan en los festivales de carreras más importantes del mundo

 

Panthalassa se estira y Dettori se resigna / Jockey Club of Saudi Arabia - Erika Rasmussen

El jockey Yutaka Yoshida tiene 47 años y en su Japón natal ha festejado muchos triunfos con premios millonarios, pero describió el de la Saudi Cup (G 1-1800 m-20 millones de dólares de bolsa) como “increíble, no tengo palabras”. Panthalassa, el caballo que le dio semejante satisfacción, acababa de doblegar por tres cuartos de cuerpo al estadounidense Country Grammer (Tonalist), dirigido por Frankie Dettori, en la pista de arena del King Abdulaziz Racecourse en Riad, la capital de Arabia Saudita. 

La carrera con más altos premios en el mundo le dio 10 millones a Hiroo Race Co Ltd, el grupo propietario, pero eso es lo de menos para un caballo que proviene de una hípica en la que las recompensas están en la estratósfera. Una hípica en estado de gracia, porque sus representantes vienen ganando clásicos importantes en el mundo desde hace cinco años, por lo menos, y en especial en 2022.

Panthalassa no es una sorpresa y menos en el mundo árabe: hace casi un año, en Dubai, empató el primer lugar de Dubai Turf  (G 1-1800 m-césped), en la jornada de la Copa del Mundo, en Meydan, con el irlandés Lord North (Dubawi), otra vez con Dettori metiéndose en la foto. Aquel resultado ya había sido inmenso para Yoshida y para el entrenador Yoshito Yahagi, acostumbrado este último a ganar en altísimo nivel en el mundo, en pruebas como el Cox Plate (G 1) en Melbourne, y la Breeders' Cup Filly & Mare Turf con Loves Only You (Deep Impact), la yegua que marcó un hito por ser el primer caballo entrenado en Japón que gana en la serie internacional norteamericana.

Panthalassa es hijo del padrillo nipón Lord Kanaloa y la irlandesa Miss Pemberley. El hecho de que Lord Kanaloa fuera Caballo del Año en Japón y Campeón Sprinter podría ser llamativo, si no se observa que es el padre de otra ganadora de la Dubai Turf, Almond Eye, que además alcanzó la Triple Corona, se llevó dos veces la Japan Cup (G 1-2400 m) y fue elegida Caballo del Año.

La satisfacción de Yahagi por el sorteo de partidores, que le dio en el que le tocó el número 1, quedó justificada con la victoria de su pupilo de punta a punta, en un desarrollo que el jockey manejó con sabiduría para sostener la atropellada de Country Grammer, en el cual Dettori encontró tardíamente respuestas para descontar una diferencia de unos siete cuerpos que le llevaba el puntero en los 500 metros, después de tener que afrontar el desarrollo muy abierto.

Para el ganador fue sólo la segunda actuación en pista de arena y para los equipos japoneses los puestos 1°, con Panthalassa; 3°, Café Pharoa (USA-American Pharoah); 4° Geolyph (JPN-Drefong), y 5°, Crown Pride (JPN-Reach The Crown), sobre seis competidores en la lista. Notable. 

Emblem Road (Quality Road), ganador de la Saudi Cup el año último, finalizó cuarto.

Concentrada en el objetivo, Madonna Key dio vuelta la tendencia y le ganó a Che Maga con una firme conducción de Brian Enrique

 

La defensora de Gran Muñeca interrumpió la hegemonía de su rival en la recta de Palermo y, corrida a fondo de principio a fin, venció sin dejar dudas en el Clásico General Arenales (G 3)

El público vio de cerca el dominio de Madonna Key sobre Che Maga / Prensa Palermo

Madonna Key lo hizo. La yegua de Gran Muñeca dio vuelta la tendencia que parecía inamovible y le ganó a Che Maga (Violence) en Palermo por un cuerpo en el Clásico General Arenales (G 3-1000 m). El kilómetro metropolitano se había vuelto inexpugnable para todas las rivales de la entrenada por Roberto Pellegatta y equipo, y no había indicios de que eso se revertiría después de la victoria por cuatro cuerpos de la candidata de la mayoría en el Clásico Bosch. Pero ocurrió.

Diferencias respecto de esa carrera hubo algunas, pero no podría decirse que fueron decisivas para el resultado: una, Juan Carlos Noriega llevó las riendas de Che Maga en lugar de William Pereyra, que había sido su jockey 23 veces sobre 26 salidas, hasta ayer. Otra fue la forma en que se desempeñaron ambas. Por afuera, Madonna Key corrió concentrada en el objetivo, con Brian Enrique, su jinete, echo un ovillo como cada vez que se lo ve pedirle todo a su dirigido cuando sabe que hay fuerzas para ir hacia adelante.

Y Che Maga, que rinde mucho corriendo de menor a mayor, aún partiendo muy bien, como ayer, fue a media cancha y tuvo a Noriega vigilando lo que pasaba hacia la verja, donde la velocista entrenada por Diego Peña tenía controladas a Wanda Zaira (Easing Along) y Pidra Preciosa (In The Dark). Lo cierto es que Madonna Key seguía en lo suyo, apenas paleteada por su piloto, mientras que era notorio que Chupino debía exigir más firmemente con su fusta.

Madonna Key nunca dejó que hubiera sensación de que la favorita inclinaría el destino de la carrera y mantuvo una diferencia clara en el disco. Este fue su séptimo triunfo, el más lucido de su campaña por la adversaria a la cual se impuso y la manera en que Brian Enrique, que dio triplete el sábado, la llevó enfocada, decidido a buscar el primer  puesto. El Picante dirigió además a los ganadores Full Yearn y Comopudosucederme.

También Cristian Velazquez tuvo una gran tarde, con tres conquistas (In Words, Madreselvas y Equal Dixie), pero Francisco Leandro Fernandes Gonçalves, el jockey que brilla cada tarde, sumó siete éxitos, con Corazón Corazón, Clara Inversión, Rammel,  El Camino Real, Joy Rosy, Okaya Cap, Trilogía Romana. Sensacional.

 

Che Maga, la velocista que hace temblar la recta de Palermo, la estrella que merece tribunas repletas esta tarde

La yegua criada por Patricio Losinno, que luce en gran forma a sus 5 años, para sumar el triunfo que le dé la docena en una campaña notable, domina el Clásico Arenales (G 3) ante rivales a las que ya superó con contundencia 

 

Losinno (de chaleco), el equipo de Pellegatta-Saldivia, once veces de festejo / Gza. Hapsa

Las formas de la cortesía señalan que a las mujeres no se les señala la edad, lo que aplicado al género femenino de la raza equina y al del sangre pura de carrera, es dable de hacer para no evidenciar una posible merma en sus condiciones competitivas en una pista. No parece este el caso de Che Maga (Violence), el orgullo de Patricio Losinno, su criador y propietario, que esta tarde será la atracción principal de la reunión en el hipódromo de Palermo en busca de su 12ª victoria. Para ella, los años son condecoraciones.

No importa que ya les haya ganado fácilmente a sus tres rivales más serias de esta tarde, en el13er turno del programa de Palermo, a las 20. Ni siquiera interesa mucho si al final del día suma el triunfo que le daría la docena. Importa su vigencia, su estado con una partida en la que mató el minuto; es el poder de convocatoria, capaz de empalidecer a machos como Labrado (Le Blues) y Luthier Blues (Le Blues), líderes entre los velocistas.

Che Maga es la más rápida en la pista de arena, donde Madonna Key (Key Deputy), Piedra Preciosa (In The Dark) y Jumpy Spring (Full Mast), aquellas adversarias con papeles ya mencionadas, nunca pudieron ganarle. Tampoco Hit Time (Hit It A Bomb) ni Wanda Zaira (Easing Along), las restantes en la nómina que aún no midieron a la candidata.

Todas meritorias, la mayoría en una curva ascendente o al menos manteniendo un nivel elevado como la primera en este párrafo, defensora de Gran Muñeca notable, y desde la anterior con Diego Peña como entrenador, en reemplazo de Alfredo Gaitán Dassie. Todas tienen 4 años y llevarán 60 kilos, igual que Che Maga.

Y hablando de reemplazos, Juan Noriega, que vuelve a la silla de la defensora de Chemeco, estará hoy en el lugar que ocupó William Pereyra en 23 de las 26 actuaciones de la yegua. Será la tercera vez que se subirá Chupino (la restante fue con Gustavo Calvente), que sabe que lo mejor suele ser esperar a que Che Maga se vaya poniendo sola, más habitualmente a la expectativa.

La yegua que hace temblar la recta de Libertador –a contramano, se entiende- merece un marco generoso en las tribunas. Cerca del anochecer porteño, el clima va a estar ideal para ponerse junto a la pista y que el viento pase fuerte.

Luis Saez no fue muy cortés en el duelo con la británica Joanna Mason y la dejó 3a en el International Jockey Challenge de Arabia Saudita

 
El panameño, uno de los más ganadores en el turf de los Estados Unidos, sostuvo un mano a mano con la jocketa británica en hasta la última de las cuatro pruebas corridas en el hipódromo King Abdulaziz , y se consagró campeón en la suma de puntos

Joanna Mason, Luis Saez y Yuga Kawanda, en el podio / Fotos: Mathea Kelley - Jockey Club of Saudi Arabia 

El panameño Luis Saez, uno de los más destacados en los Estados Unidos, obtuvo el  International Jockey Challenge, el campeonato de jinetes que convocó a siete fustas mujeres y 7 hombres y organiza el Jockey Club de Arabia Saudita, el día previo a la gran jornada de la Saudi Cup (G 1), el clásico con más alta bolsa del mundo. Saez acumuló 37 puntos en la sumatoria que repartía 15 para el 1°, 10 al 2°, 7 al 3°, 4 al 4° y  3 para el clasificado 5°, en cada una de las cuatro competencias de la tarde.

En el King Abdulaziz Racecourse de Riad, el hipódromo de Riad, Saez se llevó la primera prueba del torneo, sobre 1600 m de arena, en la montura de Wajaab (Mutahamesah), que superó por medio cuerpo a Najm Alenaya (Eastern Aria), que fue dirigida por la británica Joanna Mason. El ganador pasó por dentro en el final de la recta, un tramo en el que su rival había dominado desde la curva.

Luego, en la Round 2 de la serie, en 1400 m de arena, se impuso Medabaas (Spring At Last), con Joanna Mason en las riendas, lo que le daba un color especial al certamen, más aún porque se invirtió la exacta: la jocketa doblegó a Saez, que dirigió a Kareem (Two Step Salsa), por tres cuerpos, en una gran actuación. Tomó la punta desde el vamos y, cuando el caballo de Saez descontó mucho terreno y venía para ganarle en el derecho, Mason exigió a Medabaas, que los 100 finales respondió estupendamente, para igualar en 25 la tabla de jockeys.

En la tercera prueba, sobre 1200 m de césped, la victoria fue para Hapipi Go Lucky (Mehmas), la única yegua, conducida por el kazajo Bauyrzhan Murzabayev, que en un espectacular final batió por la cabeza al castrado Aasser (Dabirsim), comandado por Frankie Dettori, mientras que tercero finalizó un macho de 4 años, Groom (Aclaim), con el japonés Yuga Kawanda en la silla, al pescuezo. En el video que se reproduce aquí abajo –imperdible- el ganador, de negro y mangas blancas, va por dentro tras gambetear rivales; Dettori tiene la chaquetilla púrpura y blanca y va por afuera, y en el medio quedó el 3°.

En esta carrera, Saez terminó 5°, con lo que sumó 3 puntos, y Mason fue 6ª al hocio del panameño, y no cosechó puntos.

En el Handicap final, en 2100 m de pasto, se vio el éxito más holgado cuando Starcat (Lope de Vega), dirigido por el japonés Yuga Kawanda, superó por cuatro cuerpos a Incumbent (Ulysses), al que condujo Saez, que de esta forma cerró el Challenge con una buena diferencia sobre el nipón, que con esta victoria dejó 3ª a Joanna Mason, quinta en el cotejo con Labeebb (Exceed And Excel).

Cada carrera de las cuatro del campeonato distribuyó 400.000 dólares entre los propietarios ganadores, la mitad para el ejemplar clasificado 1° y el 15% de cada premio  para el jockey ganador. Luis Saez obtuvo además un bono de 30.000 dólares por el primer puesto en el campeonato.

Los números finales: Luis Saez 37 (Panamá); Yuga Kawanda, 29 (japonés); Joanna Mason (británica) 27; Joao Moreira (Brasil), 15; Bauyrzhan Murzabayev (Kazajistán), 15; Frankie Dettori (Gran Bretaña), 10; la campeona en 2022, Caitlin Jones (Australia), con 9; Delphine Santiago (francesa), 6, y Naif Alazani (Arabia Saudita), 4.

Además compitieron Victoria Alonso (España), la australiana Sam Spratt; Abdullah Alawfi (Arabia Saudita), la canadiense Chantal Sutherland y la brasileña Jeane Alves.

Saez comentó tras su conquista: “Todos mis caballos corrieron súper bien” Y sobre la tercera carrera del certamen, que perdió por cabeza y pescuezo, confesó: “Creí que la ganaba, pero apareció uno volando por afuera; mi caballo corrió extraordinario”. Saez, que llegó 2° con Casa Creed (Jimmy Creed) en el Turf Sprint del año pasado y busca desquite ante la yegua japonesa Songline (Kizuna), su vencedora por escaso margen, dijo respecto de las estrellas de la fusta que lo acompañaron en la fiesta: “Nunca pensé llegar hasta aquí cuando empecé a montar, pero todo es posible, gracias a Dios”.

Mañana estará el plato fuerte en el centro de la esceena, con la Saudi Cup (G 1-1800 m-20 millones de dólares en premios), para cerrar el festival millonario que mayor bolsa de recompensas total otorga en el mundo, con más de 35 millones de dólares. Emblem Road (Quality Road) irá por el doblete tras su victoria en la prueba en 2022.

Se endereza el barco para la talentosa Super Shine, que tiene a la vista un puerto en los Estados Unidos

Ortega Pavón busca rivales, están fuera de foco / Gza. Gustavo Duprat

Con su victoria en el Clásico Miguel Ángel y Tomás Juárez Celman, la yegua de Parque Patricios acumula dos conquistas de Grupo 2, pero además demostró su eficiencia en 2000 metros, en la Copa de Plata y el Acebal, una condición valiosa para su probable futuro en el Norte

Se endereza el barco para Super Shine (Super Saver). En el Clásico Miguel Ángel y Tomás Juárez Celman (G2- 1600 m-césped), la zaina fue terminante para ganar por cuatro cuerpos ante Whisky Chaser (Open), la mejor del buen grupo de escoltas que integraron la carrera y que no pudieron acercarse a su ritmo de puntera que imprimó la ganadora, sobre todo en el momento de las definiciones.

En 2022, la zaina que volvió a montar Eduardo Ortega Pavón como en las dos anteriores, había ganado el Luis M. Campos (G 2) y había quedado cuarta en la Polla de Potrancas (G 1), dos pruebas de la milla de Palermo que no hacían presagiar cambios en su campaña. Pero el GP Enrique Acebal (G 1) y la Copa de Plata (G 1) resultaban dos instancias más que válidas para continuar la campaña, algo que quedó claro en los segundos puestos que consiguió –el de la Copa, al pasar del 3° por el distanciamiento de Milagrosa Sureña-; ya afincada en el pasto.

El jockey llevó a Super Shine un tanto abierta en el opuesto, lo que no es problema en el codo cerrado del circuito verde de Palermo y mucho menos cuando la idea es transitar la recta final por medio. Todo terminó en una victoria holgada y en un tiempazo de 1m32s77/100, en un día en que las tres carreras de 1600 m para ganadores en la jornada, todas para ganadores, finalizaron entre 1m34s y 1m36s.

“Ganó muy bien. La verdad es que ella hizo todo sola. Busqué por el medio de la pista en la recta como hacemos todos los jockeys porque la pista está más liviana”, describe Ortega Pavón, sin revelar secreto alguno.

-Desquitaron, en las últimas había estado cerca.

-Por suerte pudo ganar. Es muy buena, la Copa de Plata (G1) es muy brava y lo mismo los 2000 m para una puntera y esta vez en la milla hizo todo fácil.

Eduardo recuerda que corrió en las tres últimas a la yegua de Parque Patricios. Por eso se puede esperar de él un dato preciso sobre el futuro.

-¿Sabés que viene ahora?

-Va a correr el Arturo Bullrich (G 2-2000 m, el 4 de marzo) y después el Criadores (G 1-2000 m, el 1 de mayo).

Lo que seguirá tras esos clásicos para Super Shine es una de esas aventuras a las que son afectos en el stud de Tatino Ibáñez y Rafael Pascual: llevarla a competir al exterior; a los Estados Unidos, más precisamente. Con estos propietarios lo lógico es pensar que será por cuenta de ellos, no una venta. “La lleva María Cristina y si me lleva a mí también, mejor”, dice entre risas pero hablando en serio Eduardo, al que acompañó una de sus hijas en el podio.

Se sabe que en los Estados Unidos hay una marcada inclinación por los 1700 m y los 1800, más que en la milla y los 2000, por mencionar carreras de media distancia. En ese panorama Super Shine parece encajar justo y lo mejor será poder elegir, porque demostró que es dúctil para saltar de la arena al césped sin problemas.    

Para Facundo Coria, Expressive Smart está vigente a los 8 años porque María Álvarez y Walter Suárez lo tienen como un potrillo

 

El jinete contó que no varea al notable hijo de Expressive Halo cada mañana pues "se me pasa", por la fuerza y la salud que tiene, y que en 1000 m eleva su nivel; el sábado, consiguió su 13er triunfo en el Clásico Viamonte (G 3), en la recta de San Isidro 

El joven defensor de El Clan Corrientes ya pasó entre Señor Artista (der.) y Turf Y Amigos / Foto: Gus Duprat

El increíble Expressive Smart (Expressive Halo) no lo es simplemente por lo que se ve en carreras como el Clásico General Viamonte (G 3-1000 m), en la que se impuso por dos cuerpos ante Señor Artista (Señor Candy), sino por razones que solo se pueden observar en cualquier mañana de pistas en Palermo y revela Facundo Coria, su jockey: “Yo no lo vareo porque se me pasa, lo monta un galopador, que lo lleva tranquilo y no se le pasa, tiene sus mañas de caballo grande, hace un poco de fuerza de más, tiene una sanidad y una fuerza… es un potrillo”.

El caballo de El Clan Corrientes tiene 8 años y 13 victorias en 51 actuaciones. Pero no en cualquier prueba: desde que debutó, en abril de 2017, a los 2 años, sólo compitió en cuatro condicionales; luego, handicaps, black type y cuatro veces el Félix de Álzaga Unzué (G 1) sin poder ganarlo, y cuyo único éxito en el máximo nivel no fue en la recta, donde ahora está compitiendo, sino en los 1600 m del Gran Premio Estrellas Mile.

Facundo ensaya una razón para que ahora se piense en Expressive Smart como un velocista: “Lo corrí de potrillo y lo que veo, tanto mirándolo como aficionado o montándolo como jockey, es que rinde mucho más en 1000 que dando la vuelta, porque con el codo tiene un golpecito de velocidad, corre muy encima de la carrera y parejea, se le hace un poquito largo. En cambio en 1000 lo pueden ligerear un pedacito pero él se pone temprano y tiene final, que es importante en las carreras de recta”. Es un diccionario de términos burreros el jinete. Alguno más hay.

“Hoy –por el sábado- lo vi ganar con mucha facilidad; en la anterior me había dado un poquito de trabajo pero esta vez alcanzó la carrera sin que lo exigiera, con mucha facilidad, había un lugar entre dos caballos y como vi que el 6 [Turf Y Amigos] no traía mucha acción lo “corajeé” y me metí. La corajeada fue después de los 500, porque hubo que hacerse lugar entre Turf y Amigos (Lenovo) y Señor Artista.

Para Coria, el motivo más importante en la vigencia del alazán está en los cuidadores, María Fernanda Álvarez y su marido, Walter Suárez: “Lo mantienen con una sanidad bárbara y una línea, ganará o perderá pero él siempre está en el mismo nivel y eso es fundamental en las carreras. Si, por ejemplo, Almendro En Flor hubiera conservado su nivel [finalizó 6°] habría sido muy peligroso, pero en las dos últimas no estuvo corriendo como lo hacía, por eso digo que sostenerse es fundamental”. Amplía el análisis Facundo, para referirse al defensor de Tres Jotas, favorito del clásico.  

“He corrido algunos caballos de Walter con esta regularidad, pero a la edad de Expressive Smart, ninguno”, termina, sonriendo, el experimentado jockey.

Zillion Stars: el gran millero vuelve a su nivel con una actuación que augura lo mejor para esta temporada

 

El tordillo del stud Tinta Roja se impuso en el Clásico Horacio Bustillo (G 2), sobre el césped de San Isidro, con la velocidad de siempre y las agallas para mantenerse al frente cuando Bamb Craf le discutió la punta en la recta final

Una gran carrera de Zillion Stars, por garra y fuerza en la definición 

Hay un gran millero recuperado. Un caballo que pasó por situaciones que fuera de una pista lo bajaron un escalón del nivel que tenía cuando había ganado el Grupo 1 más importante en 1600 m en el hipódromo de San Isidro. De regreso en su caballeriza original, fue no placé en la siguiente versión del gran premio que lo había consagrado, pero antes de que terminara 2022 volvió al triunfo en el Clásico Invasor (G 3-1400 m).

Ese caballo es Zillion Stars (Cityscape), que obtuvo el Pellegrini al mejor millero de 2021 y este sábado ganó el Clásico Horacio Bustillo (G 2-1600 m) con una demostración notable, porque salió a buscar la punta, en la recta final llevó a la par a Bamb Craf (Mastercrafstman) en un tramo de lucha intensa, y cuando lo doblegó se fue al disco para ganar por un cuerpo y medio ante Remótico (Remote), que descontó gracias al ritmo fuerte del desarrollo que había impuesto su vencedor.

“Es un pingo. En los parciales venía fuerte como siempre pero esta vez fueron 400 metros menos que en el Martínez de Hoz aquel, donde entró 4°”, dice Wilson Moreyra, el jockey ganador, cuando se le pregunta si estos 22s los 400 y los 45s para los 800 marcan una similitud con una carrera conflictiva. “De la forma en que venía aquella vez tendría que haber quedado último a 100 metros, pero tiene clase. Su distancia está entre los 1400 m y los 2000, para mí”.

Está feliz Moreyra por encontrarse afianzado de nuevo en la silla de un caballo que quiere, que le dio un Anchorena, y por el que sufrió cuando las desavenencias, de las que admite haber sido parte involuntariamente, lo tuvieron un tiempo alejado del stud de Jorge Mayansky Neer. Tampoco esconde su satisfacción por vestir la chaquetilla de Tinta Roja.

-Tuvo garra Zillion Stars, aguantó cuando lo vino a buscar Bamb Craf.

-Sí, lo que hizo el tordillo fue de un caballo bueno; al fin y al cabo es ganador de Grupo 1. Pero lo importante es que está volviendo, mejora día a día.

-Ya se lo vio muy bien desde el paseo.

-Eso es mérito del equipo. Jorge se tomó unos días de vacaciones pero gracias a Dios tenemos un gran equipo, yo me aparto porque solamente lo monto cuando trabaja, pero los capataces, los peones, Sandro Caro, que está todos los días, son excelentes. Yo me excluyo porque veo al caballo cinco minutos por día y son ellos los mantienen todo en orden las 24 horas.

De paso, Wilson informa que Jorge Sandro Caro reemplaza a Eduardo Liceri como asistente de Mayansky Neer; Fuchi pasó a ocupar ahora el puesto de Jorge Valdivieso en la casilla de jueces, y el Rubio tendrá otra posición en la estructura de San Isidro. “Liceri se lo merece, es una gran persona, está de veedor”, completa Moreyra, en el único paréntesis que le dio la charla sobre su admirado Zillion Stars. 

Alguna vez descartado, Paraná Miní muestra ahora con su invicto que puede torcer el destino, de la mano de Carlos Domingo

El potrillo estaba entre los ofrecidos por el haras La Numancia, pero la selección del entrenador fue a un rumbo distinto; luego, la muerte del caballo elegido, tras un accidente, llevó a este ganador del Clásico Criadores Argentinos al stud Pancho R. X., que disfruta de su notable velocidad, en La Plata  

Kevin Banegas resultó fundamental para serenar al potrillo / Gentileza Gustavo Duprat

 

A veces el turf da revancha. Muchas veces. Como tantos deportes. La frase viene a cuento porque Paraná Miní (Winning Prize), un potrillo de 2 años, ganó el Clásico Criadores Argentinos del Sangre Pura de Carrera (L-1000 m) y está invicto en dos actuaciones, ambas en La Plata. Por su lado, el desquite viene de situaciones a las que los caballos nos acostumbraron desde que se hacen carreras y son seleccionados: su destino no tenía las luces que lo iluminan ahora, donde este jueves dio espectáculo al vencer por cinco cuerpos.

Carlos Domingo, el entrenador, relata: “Corre como un loco. Fui al haras La Numancia con el propietario del stud Pancho R. X., que nunca había comprado un dos años, y nos mostraron cinco potrillos. Elegimos dos Safety Check, y al poco tiempo me llama Fernando Gutiérrez para decirme que uno se descaderó y lo tuvo que sacrificar”. Gutiérrez es veterinario y dueño de La Numancia, donde Domingo antes había comprado a Jobetto, y ahora a Ganas de Correr, otros dos hijos de Safety Check.

El titular del haras tuvo un gesto que el cuidador resalta. “Como ya me compraste  varios –le dijo- te aviso que me queda este potrillo”. Ese potrillo, que Domingo había descartado entre aquellos cinco que le mostraron porque “era finito, liviano”, es Paraná Miní, el que estaba para quedarse un rato más en un campo de la cabaña y al que un hecho fortuito llevó a un stud. “Si lo hubieras visto hace un año, hoy no lo reconocerías”, enfatiza Carlos.

Paraná Miní pesó 14 kg más que el día del debut, hace un mes, por ejemplo, y fue a la punta decidido en el clásico, como lo marca su temperamento. “Era medio nervioso, pero está manso; después del debut (ganó por siete cuerpos) mejoró, echó en la partida 35s2/5 –los 600 m-; lo iba a correr Juan Cruz Villagra en el estreno, pero estaba suspendido y se lo ofrecí a Banegas. Axel, un hermano de él, trabaja conmigo”.

Kevin solo tuvo que serenar a Paraná Miní en el comienzo. En la recta, cuando el zaino soltó amarras, se alejó sin apremios hacia el disco. Ni Antiguo Amigo (Daddy Long Legs), ni el favorito Alrededor del Sol (Angiolo), que había ganado las tres que corrió en el Bosque y terminó 3° a un largo y medio del escolta, pudieron inquietar al ganador.

Puede ser que para Carlos Domingo también este momento sea una especie de desquite o de redención quizá, porque purgó 4 años de una suspensión que le dictó el hipódromo de La Plata y que terminó hace una semana, por el uso del estimulante estricnina. Él dice que un video mostró al peón en una situación confusa, pero nunca pudo validarlo ante las autoridades, entonces decidió alejarse de todo, y destaca que Mónica López, propietaria de Sta. Elena, quiso que siguiera entrenando sus caballos, aunque no pudiera presentarlos en la competencia. El stud Haras Dilú también era su cliente por entonces. Durante la sanción, su hijo Martín figuró en los programas.

“Este año debuté tres potrillos de 2 años y gané con dos”, quiere destacar el entrenador, para dar vuelta la página. El otro ganador que menciona es Código Postal (Seek Again), ganador por medio cuerpo en su estreno en 1200 m en Palermo y que va a correr en el mismo escenario y distancia el Clásico Santiago Luro (G 2), el 4 de marzo.

Como su potrillo, Carlos Domingo vive una especie de revancha; en su caso, por los años en blanco en su campaña. Para eso, se juntaron los dos caminos, salvando las circunstancias de cada uno. Uno, con más kilos en su físico y “corriendo como un loco”. Domingo, reanudando una trayectoria que sabe que debe ser recordada por los triunfos, no por las sanciones.