Un ejercicio de Che Evasora, en la madrugada de Del Mar / John Voorhees-Eclipsesportswire |
La yegua argentina, que se ganó en el Gran Premio Criadores el derecho a correr en el espectacular festival del sábado en Del Mar, viene de fracasar en su debut en los Estados Unidos, con poco tiempo para adaptarse y corriendo en la punta, a contramano de sus hábitos
Una vertiginosa
sucesión de acontecimientos llevó a Che Evasora de ser una laboriosa y rendidora
yegua de carreras en Palermo, San Isidro y La Plata a estar en una gatera del Breeders’ Cup Distaff (G 1-1800 m-2 millones
de dólares en premios), el sábado, en el hipódromo de Del Mar, California. Un
viaje que empezó el 1° de mayo, cuando ganó el Gran Premio Criadores (G 1-
Todas escalas
reconocibles, familiares para los hípicos argentinos, que saben que el Criadores
le ofrece a la ganadora la chance de competir en el clásico estadounidense que ganaron Bayakoa, Paseana y Blue Prize, y
que el mercado nipón se convirtió en un destino que los criadores orientales
fortalecen buscando yeguas madre de todo el mundo, entre ellas las argentinas de
buen pedigree y generosa campaña.
Patricio
Losinno, criador y uno de los propietarios de Che Evasora, cría en su campo de
Río Cuarto, Chemecó, y también en haras amigos como Vikeda, donde nació esta yegua
y su hermano mayor, Che Evasor, que se quedó en las pruebas cortas luego de ganar el Clásico
Old Man (G
“Después de
la carrera, los dueños le van a dar un servicio de un padrillo de stados Unidos
y después la llevan para Japón”, cuenta Losinno. Tras finalizar última a 28 cuerpos
en el Zenyatta Stakes, en el debut de Che Evasora en Estados Unidos, correr la
Breeders’ Cup era un lance si quedaba bien, aprovechando la nominación. “En Argentina
fue una yegua regular, pero no del montón”, admite. “La carrera es bravísima. No
está Idiomatic (Curlin) pero creo que Thorpedo Anna (Fast Anna) es muy superior.
Por lo menos quedaron pocas yeguas”.
La
aclimatación no fue la ideal para la yegua argentina, algo que conoce Losinno, que
además es crítico de la forma en que fue conducida en el desarrollo, en la carrera
del estreno: “La corrieron en la punta, pero si vieron sus carreras debieron
darse cuenta de que se desempeña de otra forma; cuando corrió en la punta
fracasó, está para venir relajada atrás luego hacerle la partida. “Los caballos
necesitan tiempo y a mí no me gusta que corran al revés del calendario, porque eso
generalmente conduce al fracaso. Esperamos que no haga un mal papel porque la yegua
no se lo merece”, enfatiza, al tiempo que se ilusiona con que los responsables de la caballeriza R Uicorn Stable corrijan su error.
“De cualquier
manera es un orgullo que una yegua criada por uno corra uno de los clásicos más
importantes del mundo”, asegura Patricio Losinno, que, hombre del turf al fin,
recuerda aquella máxima hípica que dice que “las carreras hay que correrlas”. Y
Che Evasora se ganó el derecho de competir en el Distaff en una pista.