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| Con La Meninha, Leandrinho tuvo desquite en la agitada tarde del sábado en San Isidro |
La yegua del stud Tres Jotas, número 1 de la velocidad en La Plata, consiguió un triunfo que había anunciado de al terminar cuarta en el Álzaga Unzué (G 1), en diciembre; Edgardo Martucci criticó el fallo del otro clásico de la reunión del sábado en San Isidro, en el que el reclamo por su potranca Jeeanette, fue desestimado
Cuando La Meninha
cruzó el disco primera en el Clásico Miss Terrible (
"Fue la segunda vez que corrió en el pasto; había corrido el Álzaga Unzue (G 1-1000 metros-césped), una carrera muy brava, y había finalizado espectacular, entró 4ª. Después la corrimos en Palermo pero la primera vez la corrí muy cerca y en la siguiente tuvo varios contratiempos, se escapó de la gatera... pudo haber ganado. Esta vez, la suelta 1 le vino todo bien, aunque le sacaron bastante de abajo pudo alcanzar bien.
-¿Esa fue la
clave para que ganara?
-Sí, busqué a
media cancha porque la pista estaba mejor, como siempre cuando está pesada y la
yegua ayudó en todos lados, ganó sin pegar. Arena, césped, con codo, pesada,
liviana… La Meninha corre en todos lados, no tiene ningún problema.
Un final que hizo ruido y disgustó a Martucci
En esa misma
tarde del sábado en San Isidro se corrió el Clásico Antártida Argentina (L-1200
metros-césped), que en su ardoroso final dejó tela para cortar, como casi todas
las carreras que no se definen en las chapas, sino luego de un reclamo, que en este
caso no prosperó. Gonçalves fue uno de los protagonistas.
Finalmente, se
confirmó el marcador que se registró en el Photo-finish: 1° Full Keynote (Full
Mast), 2° Gran Porteñito (Dabster), al pescuezo, y 3ª la potranca Jeanette
(Remote), que quedó a tres cuerpos luego de que Kevin Banegas, su jockey,
debiera levantar, sin espacio al quedar como jamón del sándwich, lo que motivó
su reclamo.
En Turf Class se subrayó que el fallo fue
acertado, porque en semejante lucha no se
había observado una incorrección manifiesta, y Diego Peña, cuidador del
ganador, entendió la demanda de Banegas “porque
los jockeys defienden sus montas”, pero coincidió
con el veredicto. Gonçalves dirigió a Gran Porteñito: “Perdió una
herradura antes de largar y el herrador la acomodó
como pudo, si no, ganaba”, comentó, desestimando además que
hubiera molestado a la yegua.
Edgardo
Martucci, entrenador de Jeanette,
opinaba lo contrario: “No estoy de acuerdo con el fallo. La potranca merecía
más, no voy a decir que fue un robo, como gritaban algunos en San
Isidro, donde estuve viendo la carrera, pero
hubo foul y creo que por lo menos entraba segunda. Gonçalves le dio y la desacomodó;
lo de la de Peña fue leve. Supe que la comisión de carreras no
intervino en este caso, sino que avaló lo que informaron los comisarios”.
En las carreras
todos saben que las determinaciones de los jueces son inapelables, pero
Martucci cree que ciertos finales con reclamos merecen ser explicados.
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