"Treasure Island está hecho un potrillo, vigente, con ganas y una actitud digna de admirar; mientras me diga que quiere seguir va a seguir”

 

Gustavo Calvente volvió a la silla de Treasure Island tras casi un año y medio / Prensa Palermo

Nicolás Martín Ferro, entrenador del ganador del Handicap Dorian Gray, en Palermo, aseguró que, a los 7 años, el caballo del stud Bien de Abajo, dueño de dos Grupo 1 entre sus diez victorias, está rejuvenecido      

La trayectoria de Treasure Island (Treasure Beach) está más allá de cualquier discusión por aquello de “bajar” del primer nivel en el que compitió y ganó, para correr un handicap como el Dorian Gray (2500 metros), sin que hubiera razones físicas o de edad que lo hubieran disminuido. Tan lejos de eso demostró encontrarse que, a los 7 años, con 61 kilos en la montura y dando ventajas en el peso a todos sus rivales menos Endor Rye – fue con 62- le ganó por cinco cuerpos a este adversario, el favorito, con un ágil desempeño en la recta final de Palermo.

Nicolás Martín Ferro, entrenador de Treasure Beach, contó: “Teníamos la opción de correr el clásico de La Plata - Jockey Club de Córdoba, 2200 metros, de esta tarde- pero la verdad es que la cancha de Palermo le encanta, los 2500 metros le sientan espectacular y queríamos que ganara, que volviera a agrandarse”. El defensor del stud Bien de Abajo, de Azul, no ganaba desde el Gran Premio Dardo Rocha (G 1-2400 m) del año pasado. Después lo llevaron a Maroñas (7° de El Kodigo en el José Pedro Ramírez {G 1}), resultó 3° en el GP de Honor (G 1) y 4° en el República Argentina (G 1). “Había corrido bien el República” siguió Nico. “Esta carrera era dura, él iba de 61 kilos contra caballos livianos, estaba Endo Rye que tienen un 2° de Grupo 1”.

Pero lo que más satisfecho dejó al cuidador fue la actuación de ayer: “Ganó bárbaro, vino siempre muy bien y arriba se desprendió cómodo. Le tocó correrlo a Gustavo Calvente por el viaje de Leandro a Japón, pero se entienden a la perfección; ganó con él el Clásico Otoño (G 2) del año pasado”. 

Y lo que alienta a Martín Ferro es lo que viene, porque está claro que su caballo lo entusiasma: “Treasure Island está hecho un potrillo, cada día más sano, más lindo. Está vigente, con ganas y con una actitud digna de admirar, siempre impecable, así que mientras me diga que quiere seguir va a seguir y con demostraciones como esta, con más razón. Veremos cómo sigue su campaña pero ahora se vienen las mejores carreras para él. Él corre en Palermo, corre en La Plata, corre en San Isidro, donde lo llevemos va y defiende los porotos”.

Extrañó no ver la nutrida hinchada de los propietarios en Palermo. Sí estaba Juan de la Cruz Ramallo, criador de Treasure Island en el haras El Doguito, y parte de la sociedad. “Claudio Fabián Rodríguez tuvo que viajar a Basavilbaso, Entre Ríos, su pueblo”, justificó Nicolás a otro de los socios que disfrutan del notable fondista.