martes, 26 de abril de 2022

El Moisés, que de potrillo precoz llegó a ganar el Nacional, ya tiene un hijo que lo imita en el debut: Muy Muy Macho


Después de una primera generación muy reducida y aún sin ganadores, de la segunda surgió el dominador del Clásico José B. Zubiaurre, con lo que se refleja que el padrillo del haras Esecé comenzó otra etapa, ya sin los problemas físicos de sus inicios en la reproducción   



Muy Muy Macho, con William Pereyra, tuvo margen en el final para controlar la carga de Karalis  

Cuando el explosivo Muy Muy Macho pasó al frente para llevarse el Clásico Zubiaurre (1500 m), la figura de su padre, El Moisés (Manipulator), aquel poderoso fondista ganador del Nacional, cobró una dimensión inesperada, más sorpresiva que la victoria del potrillo del stud Esece. Pero claro, no era más que un prejuicio, sobre todo al recordarse el dato que iguala a padre e hijo: los dos ganaron clásicos para debutantes. En el caso de El Moisés, fue el Julio Félix Penna (1600 m), la versión del hipódromo de Palermo de estas carreras de novatos, en 2014.

“Es la segunda generación de El Moisés; la primera fue muy cortita”, confirma Norberto Peluso, el criador en su haras Esecé –el mismo nombre de la caballeriza, en honor a sus hijos Sebastián y Cecilia- de Muy Muy Macho. El padrillo produjo 17 crías de arranque y al año siguiente, la generación de este potrillo, 25, de los cuales ganaron 2 (se suma la potranca Ya Te Veo). “Al principio no tenía libido, no se acercaba a las yeguas –cuenta el criador-, pero después lo curamos de una pata y empezó a andar bien en los servicios. Por eso la primera generación fue acotada y yo cometí el error de vender y dispersar los potrillos, y algunos de ellos no tuvieron la suerte de correr. Igual, todos los cuidadores están contentos con las crías. Yo vendo todo y los me quedé fue porque no se vendieron”.

-Entonces a Muy Muy Macho te lo quedaste porque no tuvo ofertas…

-El caso de Muy Muy Macho fue especial; de entrada pensaba quedármelo porque me he quedado con casi todas las crías de esa madre, Muestra Gratis (Halo Sunshine); el 80% ha ganado, y dos fueron clásicos: Ya Te Muestro y Seba’s Show.

-¿Mostrabas este potrillo a los que iban a visitar el campo para comprar?

-Bueno, sí. Cuando vino (Roberto) Pellegatta a ver los caballos le dije ‘este me lo voy a quedar’ y él estuvo de acuerdo. (‘Sí, te lo tenés que quedar’, enfatizó el entrenador, según Peluso).

-¿Cómo se dio la posibilidad de llevar a El Moisés a tu haras?

-Cuando estaba para ser favorito en el Carlos Pellegrini, después de haber ganado la Polla, el Nacional y el Casey, se lesionó en las gateras y tuvo un problema en una pata. Me había enterado de que lo retiraban por el veterinario de Gregorio Vivas, que era su entrenador, y cuando hablé con José Mastellone [propietario de S de B, cuyos colores defendió El Moisés] le dije que lo iba a probar antes de comprarlo; no tuvo problema.

Mientras narra la historia del padrillo, Peluso (foto) recibe un llamado de su mujer, Graciela, que suele acompañarlo en las jornadas importantes, como cuando Sarónico Island (Lizard Island) ganó la Polla de Potrillos de La Plata. Pero hay excepciones: “Esta vez no quiso venir (se ríe). El día que El Noi (Anjiz) ganó el Estrellas Sprint (en 2009) tampoco estuvo. Graciela es la que bautiza todos los caballos”.

Pablo Costa, el veterinario del haras, y Emilio Suárez, capataz en el campo, sí  estuvieron en San Isidro el sábado celebrando el Zubiaurre de Muy Muy Macho, junto con Juan Franco Saldivia, el entrenador. Un hijo de El Moisés, el caballo de carreras notable que fue precoz, se hizo fondista y ahora es un padrillo para anotar.














No hay comentarios:

Publicar un comentario

La alegría de ganar el Dardo Rocha, un oasis en el turf que Juan de la Cruz Ramallo disfrutó con amigos, como un hípico más

  Ramallo, con Leandrinho y Nicolás Martín Ferro,  fundamentales para el triunfo  / RRPP La Plata El criador y socio en Treasure Island cel...