Kevin Banegas se lucióo en las riendas de Look Portal
El defensor de Haras Cachagua consiguió su conquista más importante en los 2400 metros con doble curva de la pista de arena de San Isidro merced a una táctica diferente pero en absoluto improvisada
Look Portal
llevó su campaña al pico más alto, no sólo porque ganó su carrera de mayor valuación, el Clásico Calidoscopio (L-2400 metros), en la
pista de arena de San Isidro. Ocurrió que, además, el caballo entrenado por
Nicolás Martín Ferro subió su nivel por la ductilidad para correr en la punta
ayer y controlar a sus rivales con autoridad, sobre todo a Gadzooks (Galán de
Cine), El Pulque (Heliostatic) y Don Nipón (Equal Stripes), que intentaron
apurarlo antes del segundo codo, para retroceder en la recta.
Fue el quinto
triunfo del hijo de Portal del Alto, el segundo clásico, en una trayectoria muy
regular, que incluye chapas en el Nacional (G1-2500 metros)
y el Dardo Rocha (G 1-2400
metros). Y ahora, a sus 4 años, el defensor de Haras Cachagua
está en un gran momento.
“Look Portal
es un caballo muy clasudo”, lo describe Martín Ferro. “Esta vez se adaptó a las
circunstancias porque no es puntero y después de estudiar la carrera vimos que
había cero velocidad y observando los rivales entendimos que era el más idóneo
para correr adelante, así que le dimos un poco de intención y después dejamos
que galopara a voluntad, en su ritmo, y nos salió bien”.
En el disco,
el conducido por Kevin Banegas, de impecable tarea, prevaleció por un cuerpo y
medio ante la yegua Flavie (Seahenge), que voló n l final, por dentro, aprovechando
esa colocación interna y terminó a un cuerpo y medio; 3° a tres largos cruzó
Gadzooks.
“Look
Portal siempre fue un fondista nato –continúa el cuidador-, capaz de galopar 4000 metros, si hubiera.
Tiene un ritmo y va y va, sin cansarse
nunca. Es muy grande, muy pesado (534 kilos, ayer). Ha corrido bien en la
arena, por eso decidimos en su momento llevarlo a La Plata, a correr la de
ganadores de una, y volvió allí luego, para ganar el Clásico Uruguay (2000 metros). Incluso
había corrido muy bien el Dardo Rocha (G 1-2400 metros, donde fue
6°)”.
Sobre la próxima actuación de
Look Portal, Nico analizó: “Su campaña siempre fue bárbara en la distancia y en
la arena (la única vez que lo llevé al pasto corrió mal). Creo que es un
caballo súper útil, que cuanto más distancia, mejor. Veremos adónde lo llevamos,
pero seguramente en la distancia y sobre arena”.
La tremenda carga de Forever Youn (5) quebró a Romantic Warrior /Foto: Mathea Kelley - JCSA
Los
caballos argentinos cerraron la marcha en la Saudi Cup (G 1), sin tiempo para
cambiar el chip del fondista al de la media distancia y para adaptarse y no
estuvieron ni cerca de demostrar su calidad
Decir que
la suerte para los caballos argentinos estaba echada desde el momento en que
emprendieron el viaje a Arabia Saudita para correr en la Saudi Cup (G 1-1800 metros-20
millones de dólares en premios), es de burrero berreta. Carlos Gardel le cantaba
a un desinformado en cuestiones de la vida (un verde) o de las carreras: “… no
sabés lo que es jugarte con 100 y 100”.
El Kodigo e
Intense For Me terminaron último, a 38 cuerpos, y penúltimo a64, entre catorce competidores una carrera
que les dolió, que fue un calvario, porque no tienen el hábito de salir a
pelear en los tramos iniciales. El propietario local Muhaideb Abdullah A Almuhaideb
los compró porque quería correr el clásico máximo de su país y por el prestigio
bien ganado del vencedor del José Pedro Ramírez (G 1-2400 metros), en la
arena de Maroñas, y por el del héroe del Carlos Pellegrini (G 1-2400 m), en el césped de San
Isidro, respectivamente.
Se sabía que
1800 metros
no es el tiro para estos dos fondistas; también, que el lapso desde la última
actuación de ambos caballos argentinos era muy breve, pero la clase que
mostraron abrió una esperanza legítima, que sólo derrumbó ese final desarrollo
claudicante. Sobre todo, esa circunstancia se dio con El Kodigo, que tuvo
bastante prensa en Riad y en el mundo (no olvidar que además fue 2° de Intense
For Me en el Pellegrini), que vieron que el caballo criado por el haras Juan
Antonio, que fue su propietario en la Argentina también, lucía un excelente
estado físico.
Full
Serrano (Full Serrano), por poner el ejemplo de un debutante temprano, venció
en la Breedres’ Cup Dirt Mile G 1-1600 metros-arena) pero había debutado a los
tres meses de llegar a los Estados Unidos -y le acortaron tiempos-. Pero empezó
en una condicional y luego fue segundo en el Pacific Classic (G 1), antes de
aquella victoria. Different (Candy Stripes), por mencionar un dato más lejano,
compitió a tres meses de arribar a Estados Unidos en 1996 y obtuvo dos Grupo 1,
un Grupo 2 y resultó 3ª en el Distaff (G 1-1800 m) de la Breeders’ Cup,
aunque no volvió a ganar allí. Cada caballo es distinto, está bien, pero hay tiempos
mínimos que deben respetarse.
Gustavo
Calvente, el jockey de siempre de El Kodigo, le dijo a Turf Diario a poco de apearse del caballo que compitió con un
rating de 117: "Estoy triste por el caballo, porque nosotros
sabemos lo que es capaz de dar, pero la verdad es que cuando se pusieron a
correr de firme se cansó y se entregó. Salió corriendo con ellos porque estaba
enojado en las gateras, como extrañando, y en un momento me entusiasmé; lo
busqué y me respondió. Pero después, cuando pusieron sexta, no pudo seguirles
el ritmo. Se entregó de cansado". Una inmejorable pintura del desarrollo.
A Intense For Se melo había visto poco en la semana en los entrenamientos matutinos. Es
cierto que lo sacaban muy temprano a la cancha, como también que no se lo pudo
“medir” en cuanto a sus formas.
El Kodigo
era un proyecto para correr la Saudi Cup por cuenta de Roberto Vignati, titular
de Juan Antonio, y el equipo de Roberto Pellegatta y Juan Franco Saldivia.
Vignati estuvo presente en el King Abdulaziz Racecourse, ayer. Luego, llegó la
oferta de Muhaideb Abdullah A Almuhaideb, así que “se dio juego de pileta y
hubo que echarse a nadar”, como para seguir con versos gardelianos. Una
aventura que ahora difícilmente continúe con la Dubai World Cup (G 1-2000 metros), como
podía preverse si se hubiera dado una buena actuación de El Kodigo e incluso de
Intense For Me.
La carrera
tuvo una definición espectacular entre el gran caballo japonés Forever Young
(Ral Steel) y el no menos notable irlandés Romantic Warrior (Acclamation), que
debutó en pista de arena luego de una enorme campaña de 9 triunfos en el césped
de Hong Kong, Australia, Japón y Dubai. Forever Young prevaleció por el pescuezo y está invicto en el hipódromo de Riad,
donde el año pasado se impuso en el Saudi Drby (G -1600 metros).
En el
video, se observa a El Kodigo largando desde la puerta 13 y a Intense For Me,
de gorra azul, desde la 2.
El ganador es nieto paterno de Candy Ride /Foto: Mathea Kelley-Jockey Club of Saudi Arabia
El héroe de
la Polla de Potrillos (G 1-1600 metros) de
Palermo, el año pasado, corrió abierto, expectante, tratando de evitar el kick back descripto por el entrenador Julio Olascoaga a Turf Class, algo que consiguió a medias
por la pared que le hizo Cyclone State (McKinzie) en gran parte del recorrido.
Oscar
López, manager de La Providencia,
criador y propietario de Giustino, comentó desde el hipódromo King Abdulaziz, de Riad: “Valió
la pena la experiencia. Y sí, el jockey lo corrió 10 puntos como dijiste, la
superficie es distinta a la de Palermo, donde él se mantuvo invicto y también es
diferente a la del hipódromo de Dubai, y le costó un poco”.
Sobre cómo terminó la carrera el hijo de Full Mast, Oscar apuntó:
“Quedó excelente, se recuperó muy rápido. Como experiencia esto es inolvidable,
de otro mundo, en un hipódromo construido en medio del desierto y que cada año,
según me cuentan, tiene avances gigantescos, con tecnología e infraestructura
de primera. El saldo es muy positivo, es un desafío grande”.
Golden Vekoma, el ganador del Saudi Derby, es hijo de
Vekoma, otro descendiente del argentino Candy Ride que se destacó como líder de
la estadística de padrillos de primera generación en 2024, en los Estados
Unidos. Golden Vekoma ejemplar venía de ganar las 2000 Guineas (G 3) en
Meeydan, clásico que significó el debut de Giustino en
el Golfo Pérsico y en el que el defensor de La
Providencia resultó noveno.
"Sólo le temo a los terronazos", dijo el entrenador de Romantic Warrior /Jockey Club of Saudi Arabia
Ganador de Grupo 1 en Hong Kong, Australia, Japón y Dubai sobre pistas
verdes, entrará en una tierra inhóspita en Arabia Saudita, donde deberá
doblegar al fenómeno japonés Forever Young, al estadounidense Rattle N Roll,
dos de los que ya tienen experiencia, y a un grupo internacional en el que El
Kodigo e Intense For Me tendrán un bautismo de fuego
Los caballos del hemisferio Norte, asiáticos y europeos, sobre todo,
tienen en la Saudi Cup (G 1-1800 metros-20 millones de dólares) el desafío de la
pista de arena, que, a las conocidas diferencias con
el césped, suma el hecho de que la composición del terreno del King Abdullaziz
Raceourse contiene materiales orgánicos que la hacen algunos segundos más
lenta. Para los analistas, la velocidad que se imprima al desarrollo será un
factor importante, como es lógico, pero si los atropelladores no llegan a la
definición con fuerza les será más difícil entrar en el marcador.
Sin embargo, la arena del hipódromo de Riad ha sido
bien tomada por algunos caballos acostumbrados a correr con éxito en el pasto.
En 2021, Mishriff (Make Believe) ganó la Sudi Cup (G 1) en su estreno en la
arena y el japonés Panthalassa (Lord Kanaloa) llegaba en 2023 con una sola
actuación en el terreno mineral, entre sus 25 carreras hasta allí.
Su entrenador era Yoshito Yahagi, bien conocido en la
hípica internacional y a cargo de Forever Young (Real Steel), el candidato para
ganar la Saudi Cup mañana, con su foja que muestra la victoria en el Saudi
Derby (G 3-1600 m)
en 2024, año en que además resultó 3° en el Kentucky Derby (G 1) y en la
Breeders’ Cup Classic (G 1).
El caballo irlandés Romantic Warrior (Acclamation),
ganador de Grupo 1 en Hong Kong, Australia, Japón y en enero pasado en Dubai,
debutará en pista de arena en esta Saudi Cup. “Tengo confianza en que va tomar
bien la pista pero no sé cómo reaccionará a los terronazos”, reflexionó Danny
Shum, su entrenador, en una referencia que ya había formulado Julio Olascoaga
respecto de Giustino y su debut en Meydan, una superficie que desde su
inauguración en 2010 presentó el kick
back al que los que temen los que vienen del césped. Ese problema es menos
marcado en el trazado de Riad, según los jockeys.
Como sea, se suma otra posible dificultad. Se ha visto
que algunos caballos argentinos radicados en Dubai superaron esa dificultad con
el tiempo y las experiencias en carrera, pero no se trataba de ejemplares del
más alto nivel. Varios de los protagonistas de mañana tendrán que probar en el
terreno y a su máxima velocidad, si son capaces de superar la exigencia.
La solución para eso sería correr lo más cerca de la
punta que se pudiera o directamente asumir el liderazgo del desarrollo y esto
no es algo que venga en el ADN de los “pasteros” o se encuentre en la manera en
que son entrenados. Aquí es donde la “clase”, ese atributo que tantas veces se
adjudica a los sangre pura de carrera, imprescindible para competir en este
nivel, debe aflorar más que nunca.
Calvente y El Kodigo se reencontraron galopó esta mañana en Arabia /Mathea Kelley- Jockey Club Of Saudi Arabia
El jockey del
fenomenal caballo argentino, que correrá el sábado la Saudi Cup (G 1) junto con
otro notable, Intense For Me, confía en que el hijo de Equal Stripes saque una
ventaja de su adaptación al tipo de superficie del King Abdulaziz Racecourse,
similar a la que pisó en Maroñas en enero, cuando ganó el Gran Premio José Pedro
Ramírez
Gustavo
Calvente llegó a Riad y ayer se encontró en la cancha del King Abdulaziz Raceourse
con El Kodigo, al que dirigirá el sábado en la Saudi Cup (G 1-1800 metros- 20
millones de dólares en premios). “El viaje se demoró un día pero llegué muy
bien. El caballo está bárbaro, en un estado tremendo, físicamente perfecto.
Quería sentir cómo estaba y ahora estoy muy ilusionado”, le contó el a Turf Diario, no bien se apeó tras el
galope.
No lo sorprende
al jockey la forma física con que reconoció al caballo criado en el haras Juan
Antonio: “Es un competidor que da todo, como ya sabemos, y si está bien, así lo
hará ahora.
Es una carrera durísima, pero la ilusión no nos la quita nadie, aunque tengamos
un montón de contras, el viaje, el acorte a 1800 metros, parece que
no se pueden tener más, pero El Kodigo tiene un corazón enorme. Estoy muy
ilusionado con que represente muy bien a la Argentina y a todo Sudamérica”.
Con todo,
hay un aspecto a favor del caballo que comptirá para el establo de Muhaideb
Abdullah Almuhaideb, un acaudalado propietario, doctor en Filosofía, que lo adquirió
teniendo como prioridad este clásico,junto con Intense For Me, teniendo como prioridad este
clásico.“Es una cancha un poco
más revuelta que la de Maroñas, que le encantó e hizo una gran carrera. Pienso
que esa pista es a la que más se adaptó y hoy me demostró que esta arena [la de
Riad], que está mucho más movida que la de Palermo (es más liviana), le gustó. Eso
me agrandó, me dio más ilusión para que haga una carrera que nos deje conformes”.
Sobre la
gatera 7 que le tocó –la última que quedaba-, Gustavo opinó: “Eso no me
preocupa mucho porque tenés un tramo para acomodarte y no quería que el caballo
se sintiera exigido en los primeros metros; el favorito (Forever Young) sale
más afuera (14). Lo más importante es que tenga un buen desarrollo, sobre todo en
los primeros metros”.
En lo personal,
Gustavo Calvente ya estuvo con Miriñaque en la jornada, aunque corriendo en césped
el Red Sea Handicap. “Todo jockey sueña con estar acá y la Saudi Cup es un tope
en la trayectoria, que tomo con mucha tranquilidad y también con responsabilidad,
para dejar bien parado a nuestro turf”.