Nacho Correas y el primer G 1 de Didia en E.UU.: “Tuve por meses este clásico como objetivo, porque fue duro perderlo hace un año"

Celebra José Ortiz, decisivo en el triunfo de Didia / Susie Raisher (Coglianese) 

 El entrenador argentino trabajó y tuvo paciencia hasta conseguir una victoria que merecía la hija de Orpen, en el New York Stakes (2200 m - césped), en el hipódromo de Saratoga, que hoy volverá a ser anfitrión cuando se corra el Belmont Stakes 

La fórmula es conocida, los componentes, similares: un buen caballo nacido en la Argentina; un entrenador de altísimo nivel, de los mejores en los Estados Unidos hoy, y propietarios que apuestan por lo que se produce en nuestros haras y compiten en nuestros hipódromos, como Merriebelle Stables, cuyos colores defendió Blue Prize (Pure Priz) y al que acaba de asociarse Resolute Racing en otro prodigio, Didia, que salió del mismo campo, Carampangue, y pero fue criada por La Manija. El viernes, esta hija de Orpen ganó el New York Stakes (2200 m, césped), su primer éxito de Grupo 1 en ese país, y la fórmula volvió a funcionar.

Didia se afirmó en la pista de césped de Saratoga, pisando por primera vez el escenario histórico, que oficia de anfitrión para su colega neoyorquino Belmont Park en su fin de semana más trascendente, que en la tarde de este sábado ofrecerá su carrera cumbre, el Belmont Stakes (G 1-2000 m), cierre de la Triple Corona, que baja ahora desde los 2400 m por imperio del nuevo trazado.

En diez actuaciones norteamericanas, Didia alcanzó siete triunfos, los dos últimos con José Luis Ortiz en las riendas en reemplazo de Vincent Cheminaud, con quien obtuvo cinco primeros puestos y llevó a la yegua argentina demasiado alejada de la punta en el desarrollo de la Breeders’ Cup Filly & Mare Turf (G 1-2000 m-césped). Ortiz le dio ahora un desarrollo ideal –el relator oficial lo elogió por ello-, a la expectativa pero sin perder de vista a las líderes, la británica McKulick (Frankel), Surprisingly (Mastery) y la francesa Royal Interest (Le Havre), entre tercera y cuarta, lo que la dejó con toda la recta a su disposición para una atropellada incontenible en el derecho, luego de abandonar los palos, que fue su línea desde la suelta.

Además de esas calificadas rivales, quedaron detrás de Didia War Like Goddess (English Channel, 3ª), dueña de tres Grupo 1, y la favorita English Rose (Frankel, 12ª y penúltima). Didia había sido segunda sin luz en la versión del New York Stakes del año pasado ante Marketsegmetation (American Pharoah), curiosamente, también dirigida por Jose L. Ortiz.

“Es un monstruo, es una gran sensación”, dijo Nacho Correas sobre la yegua, de 6 años para el hemisferio norte. “Tuve por meses este clásico como un objetivo, porque fue duro perderlo hace un año, cuando no lo esperaba. Fue una desilusión”. Luego, bromeó con el hecho de que su colega Chad Brown “sólo” presentara dos yeguas, “cuando en general son cuatro en su equipo”. Ignacio Pavlovsky, criador de la campeona, estuvo presente en Saratoga para observar y celebrar el máximo triunfo de Didia.