El enorme final del Handicap Condal se explica por tres caballos y tres jockeys formidables... y por Leandro Fernandes Gonçalves

El del medio es Love The Races; Grizi está a la izquierda, el restante es Super Agente / Gza. Revista Palermo

 

El jockey brasileño nunca abandonó a Love The Races, que le respondió con una reacción notable, como si no sintiera sus 62 kg; Grizi, con Ortega Pavón, y Super Agente, con Jairo Flores, fueron partícipes necesarios de un espectáculo que se vivió a puro grito

El final del Handicap Condal (1600 m) es un poema al turf. Uno de esos momentos que se recordará cada vez que tres caballos definan una carrera cerrada, que no se abría o que si se abría era una hendija que le duraba a cada uno milésimas de segundo. La más sencilla conclusión sería que ganó Love The Races (Hurricane Cat) porque tenía en las riendas al mejor de todos, Francisco Fernandes Gonçalves, en otra faena de su sello.

El brasileño hizo reaccionar a su caballo entre medio de Grizi (Equal Stripes) y Super Agente (Super Saver), luego segundo y tercero en el disco por medio pescuezo y cabeza, mientras que Roberts Hit quedaba cuarto a 3/4 de cuerpo. No hubo más margen ni espacio. Aquellos dos rivales habían superado a Love The Races en la recta. Super Agente, incluso, pasó al frente por un cuerpo, hasta que sucedió eso que es explicable por tratarse de Gonçalves. No de otra manera. El caballo más pesado, con 62 kg, no se cansó en el desenlace, sólo sintió la fuerza que le venía de arriba de la montura y tuvo la calidad para responder. No hay que olvidar que es ganador del Estrellas Mile (G 1).

También tuvieron clase para responder Grizi y Super Agente, qué duda cabe, con la fuerza que demostraron sus jockeys, Eduardo Ortega Pavón y Jairo Flores. Un final de tres es con tres (perdón por semejante deducción) y ellos pusieron lo suyo para hacer mejor la inolvidable victoria de Love The Races y Francisco Fernandes Gonçalves, el jockey que no se baja del trono y sigue reinando.