“La carrera es muy buena; es el mejor grupo de yeguas de Estados Unidos en esa distancia”, dijo Nacho Correas, tras el 2° de Didia

La yegua argentina dejó su invicto en Norteamérica en su primer Grupo 1 allí, el New York Stakes (2000 m de césped), donde el desarrollo sin ritmo que impuso Marketsegmentation, la ganadora, resultó un muro infranqueable para las atropelladas

Empuja José Luis Ortiz a la ganadora; por afuera asoma la cola de Didia / Joe Labozzetta-Coglianese 

La sensacional carrera de Didia en el New York Stakes (G 1-2000 m-césped), en Belmont Park, no le alcanzó para ganar su primer Grupo 1 en los Estados Unidos. Esa es la noticia concreta, aunque el calificativo del comienzo surge solo, porque es inevitable describir así la actuación en la que la yegua argentina perdió el invicto en un turf en el que se ganó un lugar importantísimo entre las especialistas en mediofondo en el césped, la división más fuerte de la categoría.

Un caballo que no es puntero se expone a lo que sucedió esta vez: Marketsegmentation (American Pharoah) marcó el ritmo adelante (24s56 los primeros 400 m; 50.26 los 800; 1m15s29 los 1200), ninguna rival se atrevió a ir a buscarla con firmeza y Didia, que corrió tercera y entró en la recta final a unos cuatro cuerpos, debió conformarse con clasificarse segunda a tres cuartos de cuerpo, a pesar de descontar terreno con un gran esfuerzo propio y de Vincent Cheminaud, su jockey, que recurrió a todos los movimientos con las riendas, a los que la yegua respondió, pero era poco el margen hasta el disco en la corta recta de uno de los hipódromos del estado de Nueva York.

“La carrera es muy buena, es el mejor grupo de Estados Unidos en esa distancia”, opina Ignacio Correas, entrenador de la defensora de Merriebelle Stable. “No hubo tren de carrera, uno no puede hacer todo, -se refiere a venir cerca y atropellar-; Cheminaud la corrió muy bien”, agrega desde alguno de los aeropuertos de Nueva York, a punto de partir de regreso a casa, en Lexington, Kentucky.

“Didia fue la única que descontó [respecto de la puntera]; es una gran yegua, ojalá un día tenga la suerte de ganar un Grupo 1”. Está claro que Nacho no es un entrenador que dependa de la suerte ni le falte experiencia. Sabe lo que tiene que hacer y allí están los resultados. “Es lo que siempre pasa en estas carreras, a Dona Bruja le sucedió dos veces. Lo bueno es que los clásicos se van a ir poniendo más duros, van a salir corriendo, como en la Breeders’ Cup, que seguramente es un objetivo”, augura sobre lo que viene, un poco amargado por no poder quebrar a la escudería de Chad Brown, que incluyó cuatro cartas aquí, una de ellas la ganadora.

Dona Bruja (Storm Embrujado) es la Yegua del Año 2016 en la Argentina que Correas entrenó en los Estados Unidos y estuvo cerca de ganar Grupo 1 dos veces. Uno de ellos fue el Beverly D. Stakes (1900 m-césped), en Arlington, donde terminó a medio cuerpo de la chilena Dacita (Scat Daddy) y que será la próxima estación para Didia. “Le voy a dar un descanso chiquito, el plan sigue siendo el Beverly D. –ahora en Colonial Downs, tras el cierre de Arlington-; después se achica el panorama, hay menos carreras, por ahora que descanse unos días”.

Para el entrenador, que ganó un Distaff con Blue Prize (Pure Prize), el saldo que dejó la actuación de Didia en el New York Stakes es positivo. “Ella no conocía el ambiente, tuvo el viaje de por medio, por el humo estuvo sólo caminando, demoró en entrar a la gatera… no es una excusa, pero estaba un poco más excitada en el paseo”. Eso sí, el galopito en la mañana de la carrera, un sedativo para ella, lo pudo dar.

El smog por la quema de bosques canadienses que baja en estos día por la costa este norteamericana se tomó una pausa durante la reunión de Belmont Park, que hoy cerrará la Triple Corona con el Belmont Stakes (G 1-2400 m). “No había nada de humo. Fue un día lindo”. Por ¾ de cuerpo, el día no fue aún mejor para Ignacio Correas. Pero fue tan bueno que la espera hasta la próxima oportunidad de Grupo 1 aparece más a mano que nunca.