"Ha sido una semana difícil", se lamentó Frankie Dettori, aunque tuvo un alivio al ganar el Coronation Stakes con Inspiral, en Royal Ascot

El carismático jockey se sacudió la mufa en el clásico principal de la penúltima jornada del festival con la potranca, que es entrenada por John Gosden, el mismo que prepara a Stradivarius, el caballo que encarnó el jueves la mayor desilusión de esta serie en el hipódromo inglés, montado por el ítalo-británico  

Inspiral

 Fue la carrera más importante del día 4 de Royal Ascot. También fue la que se ganó por mayor margen. Frankie Dettori resopló, quizás aliviado, quizá murmurando un “por fin”, apenas cruzó el disco del Coronation Stakes (G 1-1600 m) con Inspiral (Frankel), con casi cinco cuerpos ante la estadounidense Spendarella (Karakontie), que así vio interrumpida su serie invicta de tres actuaciones, dos en Gulfstream Park y la última en The Appalachian (G 2), en Keeneland Racecourse.

La que sí conservó su cartilla sin manchas fue la ganadora, que ahora subió a cinco su serie sin derrotas, 252 días después de la última, en el Fillies’ Mile (G 1-1600 m), en Newmarket, y luego debiera dejar en blanco su presentación en las 1000 Guineas (G1-1600 m), tanto la de Inglaterra como la de Irlanda. Discoveries (Mastercraftsman) quedó tercera por media cabeza ante la norteamericana.

El jockey que atrapó todas las miradas en la tarde después del duro jueves dentro de una semana negativa, comentó: “Es muy especial esta yegua. Era una carrera dura. Repasaba esta mañana lo que pasó ayer y después de leer el Racing Post pensé que era tiempo de concentrarme en lo que venía; pero es cierto, tuve un par de chances esta semana.”

Dettori fue el jockey más aplaudido que se haya visto ayer, en el túnel que conecta la pista con la zona de premiación, donde señaló al caballo como el protagonista principal y por fin pudo dar su famoso salto, que el público acompañó con el “ooooh” alargado de costumbre, hasta que sus pies tocaron el piso. “Ha sido una semana muy difícil; no se dio con Lord North (el caballo al que no pudo sacarle la máscara cuando se abrieron las gateras y largó muy retrasado el Prince Of Wales’s Stakes), las cosas no salieron con Stradivarius (atropelló tarde y terminó 3° en la Gold Cup); fuimos desestabilizados en el Britannia Stakes (con Saga se demoró en la largada) y Reach For The Moon tuvo sus chances (llegó a liderar en el Hampton Court y aflojó al final para quedar 2°).

John Gosden, el entrenador que agradeció a la criadora de Inspiral por criarla y por la pasión, dijo luego. “No miro para atrás; Inspiral corrió con atención y Frankie no se complicó como ayer. El jockey no debe atarse a las instrucciones. Es como una tela en blanco para el artista: si algo pasa en la carrera, simplemente debe hacer lo que sienta”. Frankie, se explayó: “Esta vez, la yegua pudo zafar de una mala salida, y de una rival grandota que tenía delante; se hizo un claro y la mía pasó. Claro que hay que tener una yegua de su clase para ello. Y yo disfruté de los últimos 50 metros, por fin”.

Perfect Power (Ardad) ganó el otro Grupo 1 de la tarde, la Commonwelth Cup (1200 m). Su propietario el jeque Rashid Dalmook Al Maktoum, dijo “Él es el hombre”, para elogiar al jockey Christophe Soumillion, que comentó: “Hoy pensé esperarlo, estaba a 6 o 7 cuerpos. Sabía que iba a responder. Se necesita más stamina para las Guineas -son 1600 m y por eso no corrió la primera gema de la Triple Corona-. A lo mejor hacia el final de la temporada vaya a 1400”. El entrenador Richard Fahey, que estaba acompañado por el ex futbolista de Manchester United, Michael Owen –también propietario de caballos- dijo “mejoró mucho respecto de la última semana. Es un caballo bueno de verdad”.

También se lució Meditate (No Hay Never), 1° en el Albany Stakes (G 3-1200 m), para potrillos de 2 años, tras el cual, otro deportista consagrado y propietario, el ex basqutbolista de San Antonio Spurs, Tony Parker, le dio una manta al jockey Ryan Moore, por sus 70 victorias en Royal Ascot, marca que poco después quedaría vieja, cuando el jinete repitió en el King Edward VII (G 2-2400 m).

La lista de vencedores se engrosó con Candleford (Kingman), en el Duke of Edinburgh Stales (2400 m) y Heredia (Dark Angel) en el Sandringham Stakes (1600 m de recta-yeguas de 3 años); el potrillo se abrió en el final y molestó a Zanbaq (Oasis Dream), de Shadwell, que levantó en plena atropellada. El jinete ganador, Sean Levey, no conservó la línea y fue a buscar al segundo claramente, pero no fue distanciado.

En la última, el 3 años Latin Lover (Starspangledbanner) se impuso ante Nymphadora (No Hay Never) por medio cuerpo en el Palace Of Holyroodhouse Stakes (1200 m).