sábado, 26 de febrero de 2022

Miriñaque, Zuran Zuran y Rudy Trigger tuvieron desempeños para olvidar en la jornada de la Saudi Cup

El Caballo del Año 2019 quedó 6° en The Red Sea Turf Cup (G 3-3000 m-césped), mejor clasificado pero más lejos del ganador que en 2021; Zuran Zuran fue 12° en 2100 m de césped en un accidentado desarrollo y Rudy Trigger, último en The Riyadh Cup Sprint (G 3-1200 m)



Largan el Neom Turf Cup con el tordillo Zuran Zuran (11) - Jockey Club of Saudi Arabia // Mahmoud Khaled

Una jornada para olvidar fue la de los caballos argentinos en el hipódromo King Abdulaziz, de Riad, Arabia Saudita. El resumen indica que Miriñaque no tuvo desquite, que Zuran Zuran dejó más en claro que ninguno que competir en alto nivel en el césped era una aventura, y lo mismo puede asegurarse de Rudy Trigger. La distancia con el hemisferio Norte se agigantó en la serie de la Saudi Cup, para darle la razón a los que opinan que no alcanza con buenos caballos, ni siquiera con muy buenos, si se pretende competir de igual a igual allí, y no apenas participar, sino que hacen falta súper caballos.

Esta vez no parece haber excusas de aclimatación, porque si algo se hizo bien fue la logística en casi todos, pero el lapso entre viaje y competencia está claro que no fue suficiente para estos emprendimientos.

Miriñaque (Hurricane Cat) mejoró su posición respecto de hace un año en The Red Sea Turf Handicap (G 3-3000 m-césped-2,5 millones de dólares en premios) pero su desempeño decayó y finalizó más lejos del ganador. Este sábado 26, dirigido por Francisco Fernandes Gonçalves, fue 6° a nueve cuerpos de Stay Foolish (Stay Gold), el caballo que vino de Japón y se impuso de punta a punta, mientras que hace un año el argentino había terminado 7°, a cuatro largos y medio.

Fue distinto el desarrollo, también. El defensor del stud Parque Patricios corrió ahora por dentro y hace un año lo hizo abierto, en una tercera línea, sin poder acercarse a los palos, con Gustavo Calvente en las riendas. Pero en algún momento dio esperanzas. Esta vez, fue un instante, cuando dejó el último codo libre y siempre por dentro. Había dejado de estar rodeado y se ubicaba 5°, pero luego fue relegado, e incluso debió apelar a toda su garra para cruzar 6°, una posición que sonaba improbable unos metros antes y que alcanzó por hocico y hocico ante Skazino (Kendargent) y Desert Fire (Cape Cross), conducidos por Mike Barzalona y Christophe Soumillon.

  

Zuran Zuran: una actuación que casi termina en caída 

Nunca pudo entrar en ritmo Zuran Zuran (Remote) en The Neom Turf Cup (G 3-2100 m-césped-1,5 millones en recompensas), al que Gonçalves dejó en el fondo, delante de un solo rival, y cuando llegó el momento de acelerar o al menos ubicarse mejor, ya en el codo final, no mejoró. Encima, unos pasos delante del tordillo corría Joel Rosario con Channel Cat (English Channel), cuando rodó a 500 m del disco, poco después de ingresar en la recta final. Incluso, el jinete brasileño lo pudo esquivar por poco y, aunque ya no tenía chances de mejorar demasiado –estaba último entonces- lo único que consiguió fue quedar penúltimo (12°). Rosario no sufrió consecuencias graves y pudo seguir corriendo en la jornada.

El futuro de Zuran Zuran debe decidirse ahora con la confirmación de que no es apto para correr en el pasto: en la Argentina corrió siete veces y sólo perdió una, justamente en la grama de San Isidro, en su segunda actuación. Algo que quien lo arrendó, Fahad Haif M.Alqahtani, que tiene al veterinario argentino Gustavo Bayón en sus filas y lo recomendó, como cuenta Turf Diario, tendrán presente.    

 

 Otra efímera ilusión fue la de Rudy Trigger 

El ganador del Clásico Ciudad de La Plata (G 2-1200 m) peleó un buen rato por la punta en The Riyadh Cup (Sprint) (G 3-1200 m-1,5 millones), bastante aguantó allí en realidad por tratarse de que corría en una tercera línea por afuera, junto con dos rivales, uno de ellos Dancing Prince (Pas de Trois), finalmente el ganador, que hizo maravillosa esta reunión para Japón y para el jockey francés Christophe Lemaire, radicado en ese país, que logró un cuatriplete en Riad. Sin embargo, en la recta perdió acción Rudy Trigger (Cosmic Trigger) y no sólo eso: lo pasaron todos. El defensor de Parque Patricios cruzó último la meta, a unos 30 cuerpos, y quebró la última ilusión que quedaba.

Una ilusión que se forjó sobre su frágil estreno en Medio Oriente, donde resultó 4° en una prueba en Meydan, uno de los hipódromos de Dubai. En esa oportunidad también vino al frente y se quedó sin nafta en el final, pero se trataba del primer roce en la travesía.









viernes, 25 de febrero de 2022

Con su suerte echada desde el sorteo, Andrea Marinhas casi no pudo luchar y se fue sin puntos del torneo de jockeys de Arabia


Boss (3°), Rosario (2°) y Caitlin Jones (1°), el podio del torneo de jinetes (JCSA)


La australiana Caitlin Jones quedó primera entre catorce jinetes del mundo en el hipódromo King Abdulaziz, de Riad, donde se cumplió lo que la jocketa cordobesa había anunciado sobre los caballos que le tocaron en las cuatro carreras del certamen


La experiencia de Andrea Marinhas en el International Jockeys Challenge tuvo un balance agridulce en los resultados, pero fructífero como experiencia para la jocketa cordobesa, que no pudo sumar puntos (se otorgaban 15-10-7-5-3 del 1° al 5°), pero esa magra cosecha tiene atenuantes. El primer hecho positivo fue su rol en cada actuación, peleando contra adversidades como la de la última carrera de la serie, reservada para caballos de hasta 85 libras de rating, sobre 1400 metros.

Allí, todas las posibilidades quedaron truncas en la largada, donde cuatro rivales encerraron a su caballo, Jawharat Alaelya’a (Wordly) y lo dejaron último. Luego, en la recta, mejoró y terminó 8° entre catorce.

  Ya el comienzo había sido muy complicado para Andrea. En la primera carrera del certamen, que disputaron siete amazonas y siete jockeys de todo el mundo, la argentina casi cae por un tropiezo de su conducido, Aenan Alaezm (Take Charge Indy), cuando lo encerró Montakhebah (Blue Burner), conducido por la neozelandesa Sam Collett. “Me encerró, la multaron”, contó luego la argentina. La peligrosa maniobra mereció la sanción que el Jockey Club de Saudi Arabia le impuso a Collett, en metálico.

  Luego, en la segunda competencia, sobre 1200m de césped, no pudo Andrea sacar de la mitad del lote durante el desarrollo a Emblem Star (Take Charge Indy), un zaino de 5 años que finalizó 10°. La mayor ilusión se dio en la tercera del certamen, en la que puso en la punta a los 4 años Mafroodh (Alnajim Althajeb) en una prueba de 1800 m para ejemplares de hasta 85 libras, e ilusionó con un buen desempeño, pero ya en el codo fue perdiendo terreno hasta finalizar en la 8ª posición.

  La australiana Caitlin Jones, de 31 años, terminó primera en la clasificación, con 25 puntos y un triunfo; segundo finalizó el dominicano radicado en Estados Unidos Joel Rosario, con 22 y una victoria, y tercero resultó el australiano Glen Boss, de 52 años -el más veterano del grupo-, que sumó 17 puntos y una victoria. El restante ganador de una competencia en la tarde fue el irlandés Shane Foley (33 años), que se había llevado el premio mayor el año pasado.


Posiciones (twitter: @thesaudicup)

👑 25 puntos | Caitlin Jones

🥈 22 | Joel Rosario

🥉 17 | Glen Boss

🏅 15 | Shane Foley

🏅 15 | Jim Crowley

🏅 14 | Alexis Moreno

🏅 10 | Marie Velon

🏅 10 | Sam Collett

🏅 9 | U Holmquist

🏅 8 | C Lemaire

🏅 7 | A Alfairouz









jueves, 24 de febrero de 2022

Andrea Marinhas: la argentina que va a codearse con los mejores en el International Jockeys Challenge, de Arabia Saudita

 


La cordobesa competirá en el torneo del que que tomarán parte siete jocketas y siete jockeys, en cuatro carreras del programa del viernes que es anticipo de la Saudi Cup


Uno podría pensar que para una jocketa –o un jockey- que ha corrido en Francia, en el máximo nivel del turf del mundo, estar en Riad, la capital de Arabia Saudita, para competir en el espectacular festival de la Saudi Cup, es volver a un medio conocido, con colegas de alto nivel con los que ya pudo medirse, entonces la experiencia es deslumbrante, aunque deja de ser novedosa.

Pero para Andrea Marinhas es como volver a sorprenderse con lo que empieza a rodearla en vísperas del International Jockeys Challenge, el campeonato de jinetes al que fue invitada y que se hará el viernes 25. La cordobesa pasó una temporada corriendo en Francia con un contrato y ahora se muestra maravillada por todo lo que está viendo y disfrutando en la previa de un acontecimiento que reúne a siete jocketas y siete jockeys del mundo.

“Nos estamos por ir a una fiesta, que la llaman ‘Bajo las Estrellas’, un agasajo para jockeys, entrenadores y propietarios, y hay que ir de gala, todo un tema (se ríe)”. La llamada desde Buenos Aires la encuentra a punto de asistir a uno de los muchos momentos inolvidables que tendrá la travesía. “Acá todo es lujo, una maravilla, las instalaciones, el mantenimiento de las pistas, el hipódromo, es increíble”, refuerza.

Claro que no puede dejar de ver lo que a ojos occidentales llama la atención, aún siendo situaciones ya conocidas. “Lo que te choca un poco es la cultura, el hecho de que a determinado horario los árabes rezan o las mujeres deben estar cubiertas. En mi caso no puedo usar el gimnasio o el spa, tengo que ir a entrenarme al hipódromo, que queda a un poco más de media hora, pero me arreglo”.

Después, a lo suyo, por ejemplo la impresión que le causó la pista del Abdulaziz Racecourse, el escenario de las 16 carreras de la fiesta que repartirá más de 35 millones de dólares en premios. Y aquí también hay detalles que observó Marinhas: “La cancha es linda, segura, no aparenta ser muy pesada, es la única en el mundo que tiene viruta entre la arena, para mantener la humedad y los productos que le agregan para tenerla linda”. Se sabe, casi todo lo que esté a la intemperie en medio de lo que fue desierto sufre un desgaste, así sea un piso mineral.

“A la mañana estuve mirando los entrenamientos y visitamos un haras del rey, al que justo le corro; en el sorteo me tocó uno de sus caballos. Respecto de eso me parece que no tuve mucha suerte en el sorteo de montas; los dos que tal vez tengan más chances están fuera de distancia, así que voy a tener que prestar atención a ese tema. Pero más allá de la competencia voy a tratar de disfrutarlo, como lo estoy haciendo”. Son cuatro las carreras del torneo de jinetes, donde quien obtenga el mayor puntaje, de acuerdo con su clasificación en cada una –mujer u hombre-, se llevará 100.000 dólares.

Sobre los colegas con los que se medirá, la jocketa argentina comentó: “Estuve con Christophe Lemaire, al que conozco de cuando estuve en Francia; charlamos un ratito, y también estuve con Olivier Peslier, al que también lo conocía de Francia. A algunas de las chicas las vi, pero todavía no estuve con ellas”. Lemaire se destaca hoy en Japón, donde es una estrella.

Le quedan varias horas en Arabia a Andrea, horas que incluyen las competencias por las cuales viajó hasta Riad, pero a esta altura parecen un plato más en el combo de manjares: “Es una experiencia hermosa, donde veo gente que admiro. Estoy un poco cansada porque el viaje fue muy largo, pero todo es increíble”, enfatiza y a la distancia se le adivina una sonrisa.








lunes, 21 de febrero de 2022

Tuvo que ser veloz de punta a punta Tamagochi, para imponerse en el Clásico Estrellas Puntanas y así seguir invicto en La Punta


El defensor del stud Las Tres F parecía tener por un momento todo controlado, después de defenderse desde la suelta en los 1000 metros, pero tuvo que contener el fuerte ataque final de Vaporetto Inc, que terminó a medio cuerpo


Tamagochi suma tres éxitos en otras tantas actuaciones en San Luis (Hipódromo La Punta)


 

Sólo en un pedacito de los 1000 metros que comprendió el Clásico Estrellas Puntanas (1000 m) pudo Tamagochi (Manipulator) tener un respiro del “acoso” de algún rival. Fueron 50 metros, entre los 200 y los 150, donde se desembarazó de Don Ritmo (Orpen) y pudo sacar algo de luz.  

Pero faltaba algo, la atropellada del veterano Vaporetto Inc (Include), que a sus 7 años apareció abierto y descontando, hasta terminar a medio cuerpo de Tamagochi casi a media cancha, después de largar desde la puerta 1. La gente del Stud Las Tres F tuvo que gritarlo fuerte hasta la meta a su caballo, que fue conducido por Lautaro Balmaceda. El ganador no es un potrillo: tiene 6 años.

Tamagochi, criado en el haras de la Pomme, había empezado su campaña en 2018 y consiguió cuatro victorias para el stud Friends, incluida la del Clásico Juan Lapistoy (1200 m), en la arena de San Isidro. Nicolás Martín Ferro fue su entrenador en esa etapa. Hacia fines del año pasado, cambio de dueños mediante, fue llevado a competir en San Luis, donde se mantiene invicto ahora en tres salidas, entre ellas la del Clásico Consagración Super Sprint. Eso sí, se le respetó la condición de velocista, ya con Juan Manuel Luna en el rol de cuidador y con la reanudación de las competencias en La Punta.

Balmaceda lo montó por primera vez en un handicap de Palermo -terminó 4°- después del debut de Tamagochi en San Luis, que fue en octubre y con Francisco Fernandes Gonçalves. Y volvió en el Estrellas Puntanas: “Estoy contento porque está mi familia acá. Se puso duro el final, atropelló fuerte el otro, pero el caballo se aguantó”, dijo el jinete. “Esta cancha le sienta bien y Juan [Luna, el entrenador], hace un buen trabajo para traerlo 10 puntos. Me alegra que el hipódromo esté tan lindo y que la gente acompañe siempre” agregó.

El Clásico Estrellas Puntanas, que estaba reservado para caballos de 3 años y más, inscriptos en Carreras de las Estrellas, entregó  700.000 pesos al 1°; 181.482 al 2°;  93.334 al 3°; 44.938 al 4°, y  17.284 al 5° clasificado.











Macklin, el rey de las cumbres cuyanas, ahora ganó el Vicente Dupuy, para consolidar al fondista que se forjó en La Plata


A los 5 años, el defensor del stud Don Cristóbal, venía de ganar el Vendimia, el Santo Patrono Santiago y el Clausura en su tierra adoptiva, y el domingo 20 sumó el clásico mayor del hipódromo de La Punta, que vuelve a brillar tras el confinamiento  



Celebra Daniel Gómez con Macklin ante una multitud, en San Luis (Hipódromo La Punta)

Cuando pasó por primera vez por el disco de Hipódromo La Punta, Macklin (Master of Hounds) estaba entre los últimos, delante sólo de dos rivales en el Gran Premio Vicente Dupuy (G 3-2400 m). En la siguiente pasada seguía cómodo, pero ya al frente del lote para ganar sin mayores exigencias la carrera más importante del hipódromo de San Luis. En el medio, superó al puntero Moscato Pizza (Sixties Icon) con paso firme, y en el disco de regreso estableció 7 ¼ cuerpos ante Milione (Tresure Beach), que definió el segundo puesto por ventaja mínima sobre Constanzo (Interaction).

El favorito, Gift of Virtue (Sidney’s Candy), resultó 5°, luego de su esfuerzo para seguir a Moscato Pizza –cruzó 8°- hasta quedarse sin fuerzas en la recta.

Ganador del Vendimia (2200 m), el Santo Patrono Santiago (2200 m) y del Clausura (2000 m), en el Hipódromo Mendoza, el año pasado, el defensor del stud Don Cristóbal (Mendoza) se llevó el premio de 3 millones de pesos al 1° para sus propietarios, José López y sus hijos Diego y José, bajo la preparación del entrenador Alberto Abrales. El haras El Paraíso fue el criador de Macklin.

El jockey Daniel Gómez comentó a la TV del Hipódromo La Punta: “Largó para correr con los de adelante, pero lo contuve un poco, gané terreno por dentro desde los 1200 metros y remontó la carrera muy fácil. Vine a Mendoza especialmente para prepararme  con el caballo en enero; le tengo mucho aprecio”.

Es el segundo Dupuy para el jinete, que ya había festejado en 2018: “El primero me dejó un gran recuerdo con Laureliano (Roman Ruler), fue una felicidad bárbara. Este triunfo fue especial porque estoy trabajando desde siempre con Macklin, al que aprecio porque nos ha sacado canas verdes en la última que ganó en Mendoza; le costó pero con esa carrera quedó 10 puntos. Me emociona mucho”.

Sobre la jornada del domingo, en la que también ganó el Especial Juan Esteban Pedernera (1600 m), Gómez señaló: “Tuve buenas montas, se me escapó el Clásico Estrellas por medio cuerpo”.











domingo, 20 de febrero de 2022

"Todavía no", le dijo Amiguito de lo Ajeno al sorprendente y joven Royal Rimout, en el final del Clásico Horacio Bustillo

 

Juan Cruz Villagra nunca se rindió y Amiguito de lo Ajeno, para reaccionar ante Royal Rimout (HSI)


Por un instante, en la recta de San Isidro, el puntero de Tramo 20 se había visto superado por el caballo de 3 años, pero la tenacidad de su jockey y las propias fuerzas del favorito fueron decisivas para que se resolviera el mano a mano por el pescuezo


Tenía que costarle la primera victoria de alto nivel a Amiguito de lo Ajeno (Endorsement). Su historia es la de un caballo que debe trabajar para hacerse notar y ahora lo consiguió, por fin, en el Clásico Horacio Bustillo (G 2-1600m-césped), en el hipódromo de San Isidro, pero no sin antes verse obligado a luchar por un tal Royal Rimout (Remote), que a partir de ahora y con sólo 3 años y cuatro actuaciones, será mucho más respetado que lo que era cuando salió a la pista esta vez.

A los 5 años, la experiencia, los triunfos de Amiguito de lo Ajeno parecían caerle con todo su peso al resto del lote, que lo siguió desde que se abrieron las gateras. Especialmente, a Royal Rimout, el más amenazante al dejar el codo, hasta el punto que desde allí la carrera se convirtió en un mano a mano. Y cuando el defensor de Castañón, 4 kg más liviano por el peso por edad, lejos de aflojar, comenzó a sacarle ventajas a su rival con Cristian Velazquez en una notable tarea al mantener vigilado al máximo candidato sabiendo que el suyo contaba con fuerzas, volvió Amiguito de lo Ajeno.

Ya se sabe que Juan Cruz Villagra no va a claudicar en un final así, apretado, cerrado, y le sacó lo último luchador de Tramo 2, que metió un cambio más y recuperó la punta que había prestado por unos segundos para ganar por el pescuezo, en 1.33.07. El resto, lejos, a ocho cuerpos, con Spirit of Light (Sebi Halo) tercero.

Amiguito de lo Ajeno fue criado en el haras Don Nico.

 


Happy Cross, un regalo para Gustavo Calvente
 

Hubo otro clásico en San Isidro el sábado, el General Viamonte (G 3-1000m), en el que Gustavo Calvente se hizo el regalo del triunfo con Happy Cross (Knockout), en el día de su cumpleaños. Y fue un regalo importante, inesperado, porque la yegua del stud Aladino nunca había corrido en la recta de césped y se medía con los machos, aunque es conocido que si hay una especialidad en que la diferencia de fuerzas entre géneros se minimiza es en la velocidad.

De punta a punta ganó Happy Cross, por dos cuerpos y medio ante Santos Davos (Sebi Halo), en 55.13. A los 3 años, la yegua criada por  el haras La Caballeriza suma tres éxitos en diez salidas y tiene un futuro amplio, sobre todo si Héctor Calvente, su entrenador, y sus propietarios, siguen acertando en las inscripciones con apuestas como esta.








sábado, 19 de febrero de 2022

Hubo homenajes mutuos en el Clásico Blue Prize, donde Jorge Mayansky Neer celebró gracias a Water City



Después de pelear un tramo con Brianna y de un ligero paleteo, Wilson Moreyra llevó al triunfo a Water City (Hapsa) 



La hija de Cityscape se impuso por dos cuerpos a Brianna, con la que compartió posiciones en el desarrollo desde la salida y juntas pasaron del fondo a los primeros lugares, cuando entraron en la recta final, sobre la pista de césped de Palermo


Water City (Cityscape) consiguió su triunfo más importante en el Clásico Blue Prize (1200 m-césped), en Palermo, en apenas su séptima actuación, a los 4 años. Los datos valen para poner en autos sobre la evolución de la yegua de Stud Don Leoncio, que venció a Brianna (Roman Ruler) por dos cuerpos en el único momento en que pudo desprenderse de esa rival después de correr juntas durante un minuto, cerrando la marcha en el principio.

Lo explica Wilson Moreyra, el jockey ganador, que de paso explica por qué se abrió un abanico con las siete competidoras en una línea, hacia el final del codo: “El 4 es muy ligera y por su misma velocidad siguió un poquito derecho en el codo y los demás la siguieron”, dice Wilson y se refiere a Turista (Valid Stripes), que marcó el paso en el comienzo.

“Por suerte veníamos más atrás con [Gabriel] Bonasola, complicados porque se hizo un desarrollo suave; veníamos los dos parando, y cuando entraron en el derecho zafamos los dos; de venir últimos pasamos a 2° y 3°, la verdad es que tuvimos mucha suerte. Un poco las carreras se tratan de esto, de tener suerte”. La yegua de Bonasola es Brianna, la compañera de viaje, como quedó dicho. Water City se escapó en los 100 finales y ganó con buena luz, para alcanzar su cuarta victoria en siete salidas, precedida por dos segundos puestos de jerarquía.

Sigue Moreyra, describiendo y opinando sobre la yegua criada en Firmamento: “Tiene un montón más para dar, todavía no mostró lo que realmente es. En los últimos metros se notó que se negaba un poquito a seguir corriendo y la tuve que seguir paleteando. Creo que cuando se destape va a ganar carreras muy importantes. Y yo creo que cuanto más tiro mejor, va a llegar bien a la milla de a poquito, como lo sabe hacer Jorge [Mayansky Neer] que se acomoda a lo que los caballos le van pidiendo; por ahí en la que viene la estira un poco más”.

Jorge Mayansky Neer es el entrenador de Water City, y también lo fue de Blue Prize (Pure Prize), la mejor 3 años de 2016, ganadora del Selección (G 1), la que da su nombre a este clásico. Esa yegua maravillosa que luego, en los Estados Unidos y de la mano de Ignacio Correas IV, se quedó con el Breeders’ Cup Distaff. Un homenaje mutuo.    










viernes, 18 de febrero de 2022

Después de las controversias, Jorge Mayansky Neer buscará su segundo triunfo en el Latinoamericano, con Dalbornell

El final del Martínez de Hoz; Dalbornell superó a Sandino Ruler y luego fue nominado (HSI)


El caballo del stud Ferré fue nominado por el Jockey Club luego de ganar del GP Miguel A. Martínez de Hoz (G 1), donde su compañero de techo Zillion Stars se disparó en la punta, causando el disgusto de su dueño, que de inmediato se lo llevó del stud de Palermo


Es un momento especial para Jorge Mayansky. El inevitable cruce de sensaciones que le generó el Gran Premio Miguel A. Martínez de Hoz (G 1-2000m), con el triunfo de su pupilo Dabornell (Don Valiente) y la controversia por la actuación del incontrolable puntero Zillion Stars (Cityscape), ambos entrenados por el Ruso, deriva ahora en la nominación e aquél para representar al Jockey Club en el Gran Premio Latinoamericano (G 1-2000m), que se correrá el 2 de abril en el Hipódromo Chile.

-La elección del hipódromo de San Isidro no te sorprendió…

-Yo siempre estoy a disposición, nosotros somos entrenadores; el que ganara el Martínez de Hoz iba a tener la chance de que lo nominaran. Seguramente se evaluó y estamos gustosos de correr y contentos por representar a nuestro turf, es un orgullo.

-Es una pista honda.

-En Uruguay también era profunda -por Maroñas, donde ganó el Latino con Roman Rosso- y acá (Palermo) también. Por supuesto los caballos locales están más acostumbrados, pero si querés ganar hay que correr donde sea.

Para Mayansky nunca hubo dudas en aceptar la invitación. “Siempre es un lindo desafío, son experiencias nuevas. Nunca fui a Chile, pero tengo amigos, como los de Carampangue; con Nacho Pavlovsky estuve conversando porque su opinión como manager de Carampangue es importante. En Santiago nos va a dar una mano un sobrino de Eduardo Solveyra, Pato, que es veterinario. Vamos a hacer todo como para que Dalbornell corra con chances. No hay que viajar de turista sino a ganar o perder pero sin dar ventajas.

El caballo del stud Ferré viene de tres victorias en cuatro salidas en césped, incluido el Clásico Botafogo (G 3). “En la arena corrió muy bien Dabornell, es un caballo dúctil, no tiene una única modalidad, ha corrido atrás, adelante, eso ayuda en una carrera tan difícil como el Latino”, asegura el cuidador, que relevó a su colega Eduardo Accosano al reanudarse la actividad tras la pandemia y siempre elogia la campaña anterior.

William Pereyra corrió por primera vez a Dalbornell en el reciente Grupo 1 de San Isidro. Antes, el defensor de Tinta Roja, había sido dirigido por Wilson Moreyra, que para esa instancia eligió a Zillion Stars. Este ejemplar ya no está en la caballeriza de Mayansky por decisión de su propietario, Jorge Brunasco, quien se disgustó al escuchar comentarios sobre la táctica que favoreció a Dalbornell –y a todos los atropelladores- y perjudicó a su caballo. “Jony -Pereyra- lo va a volver a correr en Chile. Es un gran jockey. Wilson tuvo que correr al otro caballo [Zillion Star] en el Martínez de Hoz; en realidad la decisión de que siguiera montándolo la tomaron los dueños, Daniel y Manuel Maranesi y está bien. Son dos jockeys de grandes condiciones; Moreyra corre más caballos en nuestro stud, pero William siempre es una opción cuando no tiene sus compromisos”.

Para el entrenador, el divorcio con Tinta Roja “es un capítulo superado”. Y añade: “Lamento haber perdido un crack, que ganó el Grupo 1 [el Joaquín de Anchorena] para que seguramente lo elijan Mejor Millero –enfatiza-; lo compramos por 150.000 pesos. Yo ya tengo tres premios Pellegrini…”. Durante la charla, una mañana de vareos en Palermo, pasa un potrillo; es el hermano de Puerto Escondido. “Recién empieza”, dice Mayansky Neer, y revela un dato: el hijo del dueño de Zillion Stars, Lucas Brunasco, le dejó los caballos junto con un socio. Uno corre el domingo 20 en Palermo. Zillion Srtars fue llevado al stud de Pablo Sahagián.  


Su primer Latino, en 1986; el triunfo con Roman Rosso

 “Corrí el Latinoamericano en Venezuela en 1986, con Salvate Tel (Telefónico); lo había comprado Marcelo Stubrin, el dueño del haras Pacífica, para un propietario norteamericano”, recuerda Mayansky, que hizo equipo con dos colegas. “Fuimos con Cacho Pascual, que llevó a Strong Wood (Cipayo), y Roberto Gigliotti, con Pedregal (El Andaluz); los caballos no llegaron bien, sintieron la altura”. Con los colores de Happy End, Salvate Tel ganó el Carlos Pellegrini que quedó en la historia por haberse corrido en febrero de aquel año, tras la inactividad generada por una epizootia de influenza. “Después corrí el Latinoamericano de 2011, casi sin chance, en San Isidro, con Lucky for Sale; había entrado 3° en el Nacional y terminó 10°, pero corrió bien. Y en 2018 en Uruguay, con Roman Rosso”.

Tres argentinos ganaron como visitantes: Roman Rosso, Latency (Slew Gin Fizz), en 2006, ambos en Maroñas, y Sixties Song (Sixties Icon), que se impuso en el Valparaíso Sporting Club, de Chile, en 2017.

Sobre los traslados de los caballos argentinos, aparentemente no tan traumáticos en los últimos años, la predisposición de propietarios y profesionales y las posibilidades ahora, Mayansky opina: “En estos momentos los mejores caballos viajaron para correr en el exterior, pero estos caballos son buenos, competitivos. A los demás países les pasó lo mismo. Todos quieren correr y representar a su país; hoy acá también es una linda sensación ir a competir afuera, sin pensar tanto en el viaje o en cómo vuelven. Village King demostró que se puede viajar y de regreso ganar el Pellegrini; Miriñaque volvió de competir en todos lados y corrió espectacular al volver también”.








domingo, 13 de febrero de 2022

En el Handicap Tatan, Gabriel Bonasola tuvo primero a Buena Brújula y luego el temple para frenar a Gonçalves con Montana Lane

 

El jinete entrerriano, de 22 años pero ya con experiencia, trajo a su yegua por afuera todo el trayecto y cuando dominó a 300m del disco controló a una rival que también atropelló, para imponerse por el pescuezo en la etapa más productiva de su campaña



Resistió Buena Brújula la atropellada de Montana Lane (Hapsa)

 

El derrotero de Buena Brújula (City Banker) es parecido al de miles de caballos de carreras: un cambio de aire les abre los pulmones… y la campaña. Desde agosto último, cuando dejó el stud Comalal (su criador, además) y corre para Don Sinfo, de Villaguay, sumó cuatro victorias en ocho actuaciones y hasta compitió en la Copa de Plata (G 1-2000 m), donde terminó 9ª. Ahora entrenada por Ricardo Cardón, aunque sin abandonar el campo de entrenamientos de San Isidro –en la etapa anterior la cuidó Coco Bullrich-, consiguió el triunfo en el Handicap Tatán (1800 m), en Palermo, tras una reñida definición ante Montana Lane (Master of Hounds), a la que doblegó por el pescuezo.

Abierta desde el vamos, su jockey, Gabriel Bonasola, la lanzó desde mitad del lote en el codo y en la recta pasó al frente a 300m del disco, donde la puntera, Sidney Queen (Sidney’s Candy) ya no pudo contenerla. A las patas de Buena Brújula venía Montana Lane, que también recorrió por afuera el codo pero quizá perdió un segundo cuando su jinete, Francisco Fernandes Gonçalves, intentó pasar más adentro pero debió volver a la línea externa. Allí, Buena Brújula le sacó más de dos cuerpos de diferencia, una ventaja que en el final descontó en gran parte la escolta, pero que sin duda tuvo su peso en la sentencia.

Bonasola es un jockey de experiencia, pese a que tiene 22 años, y es probable que ese aplomo, que aquilata cada tarde en la pista y cada mañana en el vareo con los caballos de Enrique y Nicolás Martín Ferro, Jose Lofiego y Ricardo Cardón, entre otros, haya aparecido en este final ante el jockey más ganador. “Sí, tuvimos que trabajar un poco”, dice el jinete usando el plural. “Arriba se desprendió bien; la de Gonçalves venía con mucha carga pero la mía guapeó y la pudo frenar. El desarrollo lo hicimos de menor a mayor como habíamos hablados con el cuidador. Tenía fuerza la yegua, por eso pudo venir por afuera en el codo”.

Sonrió Bonasola, surgido en 2018 de la Escuela de Aprendices que dirige Héctor Libré en San Isidro, cuando al mencionar su edad agregó un “soy joven todavía”. Por lo tanto asegura que sigue aprendiendo: “Siempre saco algo de los jockeys de más experiencia; por ejemplo, sé que cuando está [Juan Carlos] Noriega adelante es difícil seguirlo” (Y si el que viene de atrás es Gonçalves, también). El jockey nacido en Concordia, Entre Ríos, lleva 238 carreras ganadas, después de que el sábado completara el doblete un par de horas luego del handicap, en una espectacular carrera, el Premio Sausalero (1400m), en el que dirigió a Della Franchesca (Todo Un Amiguito), que vino última desconectada y atropelló por dentro para ganar por un cuerpo. Vale la pena observar el video (https://youtu.be/6sHKavWAuKY).

Fue una tarde que Gabriel Bonasola celebró con su pareja, Estefanía, y su hija, Ana Gabriela, que estuvieron en el hipódromo, que organizó “Un Día en las Carreras”.


En el Premio Sausalero, doblete de Bonasola












sábado, 12 de febrero de 2022

Con Knicks Go como Caballo del Año en 2021 en EE.UU., volvió a sentirse la influencia de la Breeders' Cup en los premios Eclipse

El tordillo y otros 14 galardonados con la distinción que otorga la NTRA tuvieron en el Classic del máximo festival de carreras de Norteamérica, que suma 37 versiones, una victoria decisiva para la elección del mejor de la temporada 



Tras la victoria en el Breeders' Cup Classic (Carolyn Simancik-eclipsesportswire)

Knicks Go (Paynter) era un ganador cantado en los Premios Eclipse, que se entregaron el jueves en el hipódromo de Santa Anita, durante la fiesta anual que organiza la National Thoroughbred Racing Association (NTRA) para distinguir a los mejores de cada año en las carreras de pura sangre. La prestigiosa organización convoca para la elección a otras dos entidades de renombre: el Daily Racing Form, el histórico medio de carreras cuyo staff selecciona en los 17 rubros establecidos, y algunos de los afiliados al National Turf  Writers and Broadcasters, una sociedad de periodistas hípicos de los Estados Unidos. En total, fueron 235 los electores, entre 245 designados, y 228 optaron por el que caballo que ya es padrillo en Taylor Made, de Kentucky.

Como suele suceder –van 51 versiones de la entrega de los Eclipse- la influencia de la Breeders’ Cup es decisiva cada año. Knicks Go ganó el Classic (G 1), al igual que el anterior galardonado, en 2020, Authentic (Into Mischief), y Gun Runner (Candy Ride, en 2017), American Pharoah (Pioneerof the Nile, 2015), Curlin (Smart Strike, 2007), Invasor (Candy Stripes, 2006), Saint Liam (Saint Ballado, 2005), Ghostzapper (Awesome Again, 2004), Tiznow (Cee’s Tizzy, 2000), Cigar (Palace Music, 1995), A.P. Indy, (Seattle Slew, 1992), Black Tie Affair (Miswaki, 1991), Sunday Silence (Halo, 1989), Alysheba (Alydar) y Ferdinand (Nijinsky, 1987). La Breeders’ Cup se corrió por primera vez en 1984.

Las particularidades de este matrimonio entre dos de los más grandes hitos del turf estadounidense cada temporada –la Triple Corona es otra liga- tuvo algunos puntos llamativos, como el hecho de que Zenyatta ganó el Classic en 2009 pero perdió ante Rachel Alexandra (Medaglia d’Oro) el cetro al mejor caballo y, en cambio, cuando cayó frente a Blame (Arch) en la increíble definición de la helada noche de Churchill Downs en el Classic de 2010, sí se llevó el reconocimiento al Caballo del Año. Otra curiosidad se dio en 2018, cuando Arrogate (Unbridled’s Song), dueño del Classic,  superó en los votos a Justify (Scat Daddy), a pesar de que éste fue dueño de la Triple Corona y tal vez víctima de la conquista de American Pharoah solo tres años antes, que había puesto fin a una sequía casi traumática de 37 años sin triplecoronado en los Estados Unidos.

Este año, además de Knicks Go, fueron consagrados campeones otros cinco ganadores en la Breeders’ Cup 2021, que tuvo como anfitrión el hipódromo Del Mar, en California; seis en realidad, pues además, el tordillo obtuvo la distinción al mejor Caballo Adulto en Arena: Ce Ce (Elusive Quality), mejor Yegua Velocista, 1ª Filly & Mare Sprint; Yibir (GB-Dubawi), mejor Macho en Césped, 1° en la Breeder’s Cup Turf; Loves Only You (JPN-Deep Impact), mejor Yegua en Césped, 1ª en la Filly & Mare Turf; Corniche (Quality Road), mejor Dos Años Macho, 1° en el Juvenile (G 1), y Echo Zulu (Gun Runner), mejor Dos Años Hembra, 1ª en el Juvenile Fillies. La influencia de la Breeders' Cup en los Eclipse Awards se verifica en la Argentina con las Carreras de las Estrellas y las distinciones Carlos Pellegrini.

Los profesionales que hicieron la campaña de Knicks Go, el entrenador Brad Cox y el jockey Joel Rosario, fueron arrastrados por el gran ganador y quedaron como los más destacados de la temporada pasada al sumar otras victorias importantes. Jessica Pfyfer (en la foto que acompaña estas líneas, de Horsephotos.com/NTRA), de 23 años, se coronó como la mejor Aprendiz de 2021 y se convirtió en la tercera mujer en lograrlo tras Rosemary Homeister (1992) y Emma Jayne Wilson (2005). 



La  siguiente es la lista de galardonados:


Dos Años Macho: Corniche

Dos Años Hembra: Echo Zulu

Tres Años Macho: Essential Quality

Tres Años Hembra: Malathaat

Caballo Adulto en Arena: Knicks Go (Paynter, 5 años de edad)

Yegua Adulta en Arena: Letruska (5 años)

Velocista Macho: Jackie’s Warrior (3 años)

Velocista Hembra: Ce Ce (5 años)

Mejor Caballo en Césped: Yibir (GB) (3 años)

Mejor hembra en Césped: Loves Only You (JPN) (5 años)

Caballo de Steeplechase (Carreras con Obstáculos): The Mean Queen (IRE) (5 años)

Propietario del Año: Godolphin

Criador del Año: Godolphin

Jockey del Año: Joel Rosario

Aprendiz del Año: Jessica Pyfer

Entrenador del Año: Brad Cox

Caballo del Año: Knicks Go (5 años)




 




martes, 8 de febrero de 2022

Sin más pruebas de fondo que dar y descartado el Latinoamericano, Shy Friend se enfoca en la ruta clásica de 2022 a paso firme



El hijo de Equal Stripes superó por siete cuerpos a Speedo, de punta a punta, en el Clásico Los Haras (L-2000 m), en Palermo, con lo que después de tres meses sin competir, desde que resultó tercero en el Gran Premio Nacional, quizá su última carrera de fondo  


El caballo de Carmel se desenvolvió a voluntad, con Juan Noriega (Hapsa)

 

En la semana en que se supo que Sandino Ruler (Roman Ruler) está casi retirado de la competencia por una lesión sufrida el sábado 5 en el Gran Premio Martínez de Hoz (G 1), donde fue segundo de Dalbornell (Don Valiente), y cuando están a punto de conocerse los representantes argentinos para el GP Latinoamericano (G 1), del 2 de abril en Hipódromo Chile, Shy Friend (Equal Stripes) ganó con la amplitud que se esperaba el Clásico Los Haras (L-2000 m), en la pista de arena de Palermo.

El defensor de Carmel, que había asomado como uno de los mejores potrillos de 2021, se despidió de esa temporada con la 3ª posición en el Nacional (G 1) y volvía ahora en una carrera accesible, con ventajas en el peso por edad y reducida en su lote, pero que todos sus responsables, desde Nicolás y Enrique Martín Ferro y Juan Carlos Noriega a su propietario, Julio Menditeguy, tomaron bien en serio.

Por eso Shy Friend salió decidido a marcar el paso, con diferencias que se hicieron más claras en el derecho final, hasta marcar siete cuerpos sobre Speedo (Equal Stripes), un buen caballo de la escudería de Roberto Pellegatta, que presentó Juan Saldivia. “Tuvo un año duro, corriendo todas las bravas y esta era una linda carrera para reprisar”, resumió Noriega el antes de que sonara la campana. Y es así: ganador del Gran Criterium (G 1) y el Casey (G 2); 2° en las Dos Mil Guineas (G 1) y 3° en el Ensayo (G 3) antes del Derby, hubo un estrés importante. El después fue más sencillo de explicar aún para el jockey: “Es un caballo muy corredor y esta es su distancia ideal”.

Los tiros más extensas parecen haber quedado atrás, aunque con un competidor como el criado en Abolengo nunca se puede ser terminante en ese sentido. Por ahora, lo que se sabe es que no será llevado a Chile para el Latino el 2 de abril, una posibilidad que en Hipódromo Argentino tantearon apenas terminado el Clásico Los Haras. Así, el destino estará en el Classic de Carreras (G 1-2000 m) y en los campeonatos del hipódromo de Palermo.


EN UNA CATEGORÍA INESTABLE, AHORA GANÓ A MEDIA LUZ

 El rubro que comprende a las yeguas de media distancia con velocidad, es de las más irregulares a nivel de black-type. Entre ganadoras nuevas o inesperadas y ausencias, la figura dominante y constante es difícil de encontrar. En el Clásico Espadaña (1400m-césped) había competidoras importantes, como Bless Candy (Señor Candy) y Tit Ruler (Roman Ruler, fijnalmente retirada), que venían ganándose una a otra, y Saragossa City (Seek Again), que recuperó su imagen tras ganar un handicap.

Pero ganó A Media Luz (Exchange Rate), a la que no debe achacarse falta de méritos para ello, aunque estaba un poco alejada de las luces tras dos actuaciones sin éxitos en el final del año pasado. Lo suyo fue sencillo a la vista, en el pasto de Palermo: Gustavo Calvente la escondió en el medio del breve lote y la abrió en la recta final para superar a la puntera Indicada Girl (Asiatic Boy) y su escolta Bailantera Sos (Catcher In The Rye), para luego superar a Saragossa City, que también había progresado por afuera.

Cinco victorias en veinte salidas acredita la yegua del stud San Antonio, de Bell Ville, Córdoba.

 









lunes, 7 de febrero de 2022

El linaje imperecedero de Comalal y las agallas de Brian Enrique se unieron en el triunfo de Moyvore Rose, en el Clásico Juan Shaw

La yegua de 3 años se puso a correr con las distancias extensas y obtuvo su primera conquista de grado en San Isidro, para satisfacción de su propietario, Santiago Martínez de Hoz, y la vigencia de los colores históricos















El haras Comalal puso todo su linaje sobre el césped de San Isidro, en el final del Clásico Juan Shaw (G 2-2200 m), y Brian Enrique agregó la astucia y el coraje para pasar por los palos, lo que terminó de redondear la victoria de Moyvore Rose (City Banker) sin luz ante Emerit Craf (Mastercraftsman), pero clara, terminante. El jinete había empezado su fin de semana clásico ganando el Casares, en las riendas de La Clota.

La yegua, de 3 años, suma ahora tres éxitos en siete actuaciones y éste fue el más importante de su campaña, inmejorable momento para que Santiago Martínez de Hoz, su propietario, pudiera celebrarlo con su primer nieto, Iker, y los padres del bebe, su hija Isabel y Miguel Echeverría. En medio de su alegría, Santiago tuvo tiempo de contestar algunas preguntas.

-¿Adónde va esta copa?

-A casa, a la biblioteca. Esta yegua es mía y pertenece a una familia muy buena de Comalal, la de Tihama (Fitzcarraldo). Una familia que dio a Star Oh The City [ganadora de los clásicos La Mission (G 2), Los Criadores -dos veces-], a Moon Of The City, que ganó el Clásico Ignacio e Ignacio F. Correas (G 2), ambas propias hermanas de Moyvore Rose.

  Tihama es hija de Teie (Unánime) y madre de De Pizarra (Mutakddim), ganador del Dardo Rocha y padrillo en Uruguay hasta su prematura muerte. Con todo ese bagaje ahora está Moyvore Rose. “Es una yegua muy corredora. De grande se ha puesto a correr. Esta familia no es de precoces, para las primeras carreras de 1400m y 1200 no están, pero una vez que agarran la distancia empiezan su mejor campaña”. El criador de Moyvore Rose es Joe Nelson, y la madre está en el campo de Comalal, en Mar del Plata.

-Santiago, ¿hoy estás criando para vos?

-Yo crío en Comalal para mí, tengo seis o siete yeguas y allí se encarga (su hermano) Eduardo de la cría, con un muy buen capataz, Carlos Piedrabuena, y nos va bien, con pocas yeguas y comprando servicios. Allá quedaron madres que son de la sociedad de Comalal y yo soy el que mayor cantidad tengo. Hacemos sociedades con Santiago Viale, que es muy amigo, así que este triunfo está dedicado a él.

Pese a que hubo una recordada subasta final en La Rural, hace años, donde José y Raúl Nelson compraron a Tihama, la chaquetilla de Comalal se resiste a alejarse de las carreras. “Mas que todo nos divertimos y de paso seguimos con la tradición”, cuenta Santiago. “Para mí, ganar con estos colores es muy importante. Después de que el haras se liquidó siempre traté de tener caballos, siempre con los colores de Comalal, y me ha ido razonablemente muy bien. Las yeguas las traemos a San Antonio de Areco y Capitán Sarmiento, a Penco Hué,  y se sirven con los padrillos que elegimos. Cuando los potrillos y potrancas están para domar vienen a lo de Santi Viale y de ahí a los studs”.

Sobre el futuro de la ganadora del Juan Shaw, Martínez de Hoz lo intuye, pero falta una opinión: “Vamos a ver qué decidimos con Dany Etchechoury, seguramente irá a los clásicos de Palermo, que son los que vienen ahora. Por hoy –sábado- voy a dormir bien; es una alegría tremenda”.