Enrique Piccardo con la adrenalina al tope, entre El Eminente en el Jockey Club y las novedades que pone en marcha San Isidro

 

El criador, propietario y directivo compite el sábado uno de los candidatos, que llevará su chaquetilla en la segunda etapa de la Triple Corona y, en la tarde en que el hipódromo inaugurará oficialmente la pantalla gigante frente a las tribunas   

La victoria de El Eminente en el Ensayo, donde venció a Hacer Un Puente / Hipódromo de San Isidro

Lo que va a pasar el sábado en San Isidro es una de las fiestas que celebra el turf cuatro o cinco veces al año; esas que están más allá de los nombres de los protagonistas, de asistencia obligatoria aún en tiempos de streaming y transmisiones en vivo. Y si es excitante para el público, los propietarios, los criadores, los profesionales y los trabajadores (del hipódromo, los studs y los de los haras, que lo viven a la distancia en la mayoría de los casos), qué pensar cuando uno de esos roles es compartido con el de dirigente, en este caso del Jockey Club.

Enrique Piccardo entró en el turf hace diez años y hoy cría, es dueño de colores y también es vocal de la Comisión de Carreras de San Isidro, ámbito en el que junto con Diego Zavaleta, están a cargo del Campo 2 de entrenamientos. Por eso, cuando la chaquetilla de El Quintón Lobos brille en la redonda durante el paseo del Gran Premio Jockey Club (G 1-2000 m-20 millones de pesos en premios), en el 13er turno, a las 18.35, entre obligaciones y emociones, la adrenalina le va a correr como pocas veces.

“Un poquito nervioso estoy”, admite Piccardo, que tendrá un protagonista en el número máximo del día, la segunda gema de la Triple Corona: El Eminente (Il Campione). “Me falta ganar el Jockey Club y el Nacional”, apunta como para acreditar experiencia. Y recuerda “Con una yunta corrí el Nacional de 2014: Interbanking (Pure Prize) y Pitbull (Majestic Warrior), y gané con Entropía (Mount Nelson) mi primer Grupo 1 (el Criadores)”, suma a los laureles con sus colores; luego están las conquistas en copropiedad.

“Está muy bien. Llega perfecto a la distancia”, asegura el propietario sobre el caballo al que compró en un remate, asociado con Juan Carlos Echeverz, otro integrante de la Comisión de Carreras. El final del Clásico Ensayo (G 2-1800 m), corriendo a fondo para doblegar por medio cuerpo al aguerrido puntero Hacer Un Puente (Cosmic Trigger), al que siguió desde el vamos, le da la razón. Ese rival será uno de los catorce a los que enfrentará el sábado.

Uno pregunta por el jockey de El Eminente: Iván Monasterolo reemplazará a Juan Cruz Villagra, que esta vez tiene el compromiso con la caballeriza Mamina y El Musical (Il Campione), tal vez el favorito. “Para mí, las carreras las ganan los caballos”, relativiza el dato. Y se enfoca en el padrillo. “Hay tres hijos de Il Campione en el Jockey Club. Está como Fortify en su momento y va segundo en la estadística”, destaca. El reproductor fue un punto decisivo en la elección del potrillo. “Está segundo en la estadística”. Enrique informa, de paso, que seguramente comprará servicios del padrillo para sus yeguas madre.

Pero hoy, los sentidos del directivo están en disfrutar la semana del Jockey Club y esa jornada que sumará el duelo Labrado-Luthier Blues en el Gran Premio Suipacha (G 1-1000 m), más el Gran Premio San Isidro-Copa Dr. Melchor Ángel Posse y la inauguración oficial de la pantalla gigante a la altura del totalizador de la oficial (quedará en desuso). Para disfrutar el turf desde todos sus costados.