Dos potrancas sin roce, que buscaron su oportunidad en el Luis María Campos (G 2) de Palermo, les dieron a dos jinetes la chance de asomarse a un nivel alto con una definición que marcó empate y que le permitió al uruguayo obtener su primer éxito de Grupo
Banegas-Super Shine están en el medio; el 2 es de Aserito-Obia Star, atrás Dona Morebi, 3a (Hapsa) |
Lo espectacular e incierto --por el suspenso- de la definición del Clásico
General Luis María Campos (G 2-
En el disco –y solo en el disco- se juntaron la puntera, Super Shine, ganadora
de una en dos salidas, y la aún perdedora Obia Star. Las dos ligaron lo suyo en
esa largada: Obia Star partió dando un salto y quedó última en el desarrollo. Banegas
y Super Shine recibieron un golpe cuando Kiev Princess (Daniel Boone) salió
hacia adentro, pero eso no le impidió instalarse en la punta.
Aserito remó a media cancha en la recta final para recuperar terreno y
descontó. Kevin debió luchar con las riendas para que su conducida no mañereara
y pudiera desembarazarse de Kiev Princess, todavía su sombra. Obia Star alcanzó
en el espejo. Tercera, a medio cuerpo y por los palos, terminó 3ª Doña Morebi.
Escribió Banegas en su cuenta de Instagram: “¡Pese al golpe que recibió en la suelta, esta potranca guapeó y nos regaló esta hermosa carrera!” En un momento así, se siente que se puede salir delante de un tropiezo, muy serio en su caso. “Seguimos siempre hacia adelante, con fe y con convicción, porque creo en mí y en lo que hago; siempre correré con la cabeza, pero también con el corazón”, añadió. El jinete alude a la prolongada convalecencia que le demandó una fractura de fémur, en un accidente en Palermo, hace casi un año.
Para medir cuánto valió para
Aserito, basta anotar que este triunfo fue el primero del uruguayo en un
clásico de Grupo. “La vi muy
dura. Kevin no vio perder a su yegua y yo tampoco a la mía, no estaba claro. Y
no estábamos tan errados. Un salto más y ganaba la mía”, se afirma. “Salir de
perdedora en un clásico es un mérito muy grande de la potranca, a la que con su
cuidador [Leonardo Antognozzi] consideramos muy útil por la atropellada que
tiene, y esta vez lo demostró”, analiza el jinete que se inició en Entre Ríos.
Y agrega: “Obia Star se ha enfrentado con yeguas que van a correr las Mil
Guineas y ella estuvo siempre ahí. Muchas veces por el desarrollo desfavorable,
por venir encajonada, no salió de perdedora antes. Ahora le busqué libertad y
por fin se le dio el triunfo”.
Un clásico disminuido por la falta de figuras, Maximiliano Aserito y Kevin Banegas lo convirtieron en un gran premio que no van a olvidar.