Lagarto Boy: de partenaire de caballos consagrados al espectacular ganador de su primer clásico, por diez cuerpos

 

El defensor del stud Cayca Ranch se impuso a su estilo, de punta a punta, en el Clásico Antonio Cané (G 3), en La Plata, y ya está en carrera para el Dardo Rocha con un entrenador de gran eficacia en el Bosque   

Cuarto éxito del hijo de Suggestive Boy / Gza. Prensa La Plata

Pavada de triunfo consiguió Lagarto Boy (Suggestive Boy) en el Clásico Antonio Cané (G 3-2100 m), el primero suyo en el alto nivel, la marca más alta de su trayectoria hasta ahora. La conquista a la que le estuvo rondando desde 2022, pero que no le permitieron conseguir rivales como Miriñaque (Hurricane Cat), Malibu Spring (Greenspring) y Treasure Island (Treasure Beach).

Ayer, en el hipódromo de La Plata, el defensor de Cayca Ranch se destapó como si una fuerza opuesta se hubiera liberado, con una actuación contundente: de punta a punta, Wilson Moreyra lo llevó a la meta, a la que llegó con 10 cuerpos de ventaja sobre Galán Galés (Expressive Halo), que dejó 3° por medio pescuezo a Picaflor Letal (Don Letal). Todos esos rivales lo siguieron sólo desde el codo, porque hasta allí el que lo exigió fue Super Inter (Easing Along).  

“Siempre lo tuve como un caballo excelente”, dice Jorge Mayansky Neer, entrenador de Lagarto Boy, que sumó su cuarto éxito, y enseguida destaca: “Es el primer caballo que tiene Matías Zabala”. Ese no es un dato banal. Seguramente Jorge sintió algo de alivio porque el ejemplar que ve cada mañana y del que le cuenta lo bueno que es a un propietario novato desde hace tiempo, consiguiera la victoria.

Después, el cuidador habla del jockey, aquel que lo hizo renegar al principio de su carrera y que ayer estuvo recibiendo premios con la familia, sus hijos Francisco y Rosarito y su mujer. “Siempre hice duplas con buenos jockeys, Agustín de Arriba, Juan Jarcovsky, El Corto Méndez, Juan Cruz Villagra, Gonçalves y Altair apenas llegaron; siempre tratamos de hacer binomios”. Gonçalves y Altair tuvieron oportunidades que Mayansky Neer les dio desde el principio. “A Wilson a veces se le mezcla el agua y el aceite –grafica - pero es un gran compañero de trabajo”, agradece.

Es conocido el gusto de Jorge por correr sus caballos de nivel en La Plata. ¿Un ejemplo reciente? Lagarto Boy fue escolta de Miriñaque en el último Dardo Rocha (G 1). “Si la meta es el Rocha tiene muchas carreras antes. Lagarto Boy está en la mejor edad para mí [5 años desde mañana], asentado; era muy nervioso y corrió contra caballos buenos, Malibu Spring, Miriñaque… Esta vez me llamó la atención la forma en que remató, después de pelear con un buen caballo como Inter Cleante”.

Y reafirma la idea: “Sí, me gusta La Plata, el 8 de enero de 1983 gané mi primera carrera con la patente de entrenador con la yegua Pourtant, del stud Pacífica, una hija de Peter Prompt”. Este padrillo era hijo de Pronto, es decir, hermano paterno de un tal Forli.

Andrés Smetana: "Yo no hice nada", asegura el veterinario de Belleza de Arteaga, la "sanísima paciente" que lleva nueve éxitos al hilo

 

El experimentado profesional le da todo el crédito a Roberto Pellegatta y Juan Saldivia, la dupla de entrenadores que se mantiene invicta en esa serie de la defensora de Chos Malal, que está clasificada para otra Breeders' Cup Distaff, la del 4 de noviembre en California  

Wilson Moreyra se persigna; Punta Turquesa, excelente escolta por dentro / Gza. Revista Palermo

Ni un tratamiento providencial, ni horas de trabajo clínico en el stud, (como ocurría con el gran Malibu Spring, Caballo del Año 2022), ni un cambio en las distancias, las superficies o los hipódromos. Lo que operó en la transformación de Belleza de Arteaga para convertirla en ganadora de nueve carreras consecutivas fue el trabajo en equipo y la idea de uno de los entrenadores de la yegua del stud Chos Malal.

La historia de la hija de Cosmic Trigger merece ser refrescada desde el punto de vista sanitario, más teniendo a mano a Andrés Smetana, veterinario de larga trayectoria y reconocido en los hipódromos –incluso en La Punta-, que confirma todo con un despojado “yo no hice nada”, mientras el sábado, en el hipódromo San Isidro, se observa la repetición del Clásico Estrellas Distaff – Copa Alejandro Menditeguy (G 1-2000 m). Donde sí hizo algo el profesional es en el origen de esta etapa de nueve victorias al hilo de la alazana.

“Belleza es la yegua de un amigo de veinte años, al que le atendí caballos siempre, Cacho Valenzuela”, cuenta Smetana de arranque. “Él me pidió el número de Juan Saldivia para llevarle la yegua al binomio [Roberto Pellegatta-Saldivia]. Me dijo ‘tengo esta yegüita, a lo mejor ganamos un handicap’ (se ríe). La yegua ayuda un montón, es muy sana, le encontraron la vuelta, con el capataz, Jorge Casafús, y el peón la tratan de una manera especial, era muy nerviosa”, explica.

Luego, Andrés confiesa que no hay pócima alguna que haya prescripto él: “Yo siempre la mantuve desde el punto de vista sanitario, pero ella te ayuda un montón, es sanísima. Atender una yegua que gana nueve carreras seguidas… no me había pasado nunca en 38 años, creo que a Roberto tampoco, es raro, difícil. Yo empecé en 1985 con el doctor Jorge Alberto Álvarez, un capo, y ahora atiendo los studs de Martucci, Carly, el Colorado Suárez, Carlitos Gutiérrez, tengo la suerte de trabajar mucho. Empecé con Roberto. En la Argentina tenemos grandes veterinarios, en el training y en la cría, que pueden trabajar en cualquier parte del mundo”.

Smetana detalla cómo operó el up-grade Belleza de Arteaga: “Pellegatta y Saldivia le encontraron la manera de llevarla, la varean mucho de tiro con el capataz, Jorge Casafús, y el peón, dos fuera de serie. Hay cosas que se pueden dar a caballos de mucho nervio, son naturales y ayudan, pero en este caso los cuidadores tuvieron la lucidez para trabajarla. Lo dijo Roberto: Juan le sugirió varearla así y le dio libertad para hacerlo”.

Y respecto de su propia intervención, recuerda el veterinario: “Las cosas de la vida; cuando fallece Federico Caracoche, el dueño de Las Raíces, que se liquida, Cacho la compra pese a que todos le decían que era de mucho genio y sangradora, y al hijo de él, Jorgito, le encantaba y la compraron. La yegua tiene una calidad… corre en todas las pistas”.

Por allí pasa el criador y también quiere reconocerlo Andrés: “Roberto Vignatti y Juan Antonio hacen un gran trabajo con el padrillo (Cosmic Trigger)”. Y sobre su propia trayectoria, afirma: “Creo que a mí me queda poco para empezar a parar un poquito; el jueves había salido un poco amargado de la cancha de Racing –empató con Barracas 1-1- y hoy me dio esta satisfacción la yegua”, confiesa, a pura risa.

A un paso, Cacho Valenzuela le está contando a REVISTA PALERMO: “Estábamos como locos desde antes de la carrera y ahora, lo único que pido es que quede sana porque queremos ir a correr a Estados Unidos ya”. De esos trámites que van a llevar a Belleza de Arteaga a Santa Anita Park para competir el 4 de noviembre se van a encargar Breeders’ Cup Ltd. y John Fulton. De que esté sana se ocupará Smetana, que ya conoce el trabajo.

“Sabíamos que Natan iba a volver, los caballos tienen sus momentos”, dice Camilo Bautista, tras la victoria en el Estrellas Classic

 

La fuerza de Adrián Giannetti y la respuesta del recuperado Natan / Gza. Revista Palermo

El propietario colombiano -asociado a Tomás Fernández Llorente- contagió su confianza a todos en el stud Las Monjitas y lo celebró con la segunda victoria en el máximo nivel del hijo de Señor Candy, criado en Carampangue

   

Natan se sobrepone a todo. No tiene la dicha de una salud prodigiosa como Belleza de Arteaga, por ejemplo, que no para de ganar desde que se subió al tren de los clásicos ni estuvo metida –es cierto que involuntariamente en el caso del caballo- en controversias que en muchos generaron dudas sobre el verdadero nivel del potrillo, después de que ganara en buena ley el Jockey Club (G 1).  Natan (Señor Candy) se sacudió ayer el polvo más renegrido de su pasado y se impuso en el Gran Premio Estrellas Classic – Copa Escribano Hernán Ceriani Cernadas (G 1-2000 m), la carrera con la que culminó un fin de semana al que sólo le faltó el sol, en el hipódromo de San Isidro.

Desde aquel triunfo de octubre en la Triple Corona, el defensor de Las Monjitas estuvo sin competir hasta el 10 de mayo, cuando resultó cuarto de Roberts Hit en el Clásico Macon (L-1800 m). Allí empezó a moldear la victoria de este sábado, que redondeó con trabajos excelentes luego de la reaparición.

En el medio de un lote compacto que encabezaba Super Number (Super Saver), el corto grupo le facilitó el  manejo a Adrián Giannetti, en la montura de Natan. Sencillo: vino por dentro y fue abriéndose para atropellar en la recta, como le gusta al jinete. Después, ya en la recta final, en los 300 pasó al frente, mientras desde el fondo, bien lejos, atropelló su compañero Jazz Seiver (Super Saver), para quedar 2° a un cuerpo y medio.

“Hoy teníamos fe porque a las Estrellas se va con naranja”, dijo entre risas Camilo Bautista tras la premiación y acariciando la bufanda que, con su traje azul, formaba los colores de la chaquetilla de Las Monjitas. “Desde que comenzamos con el polo en Colombia usamos esos colores y seguimos en el turf, ahora corriendo también en los Estados Unidos”.

Sobre Natan, Bautista arranca con un suspiro: “¡Qué placer! Como todo, siento que los caballos son seres humanos, sólo les falta hablar, en lo demás son igualitos a nosotros. Tienen sus momentos buenos y malos, y mira, sabíamos que Natan iba a volver, reprisaba después de sus problemas y ahí está”. Cómo negarlo. Si hay algo de lo que sabe el propietario es sobre caballos, porque lo vive desde que empuñó un taco y las riendas para jugar al polo.  

En el día de su cumpleaños, Camilo Bautista agrega una frase que denota su fe en  el caballo y algo más. “Con la ayuda de Dios creo que lo vamos a ver con más triunfos aquí mismo, en San Isidro, porque vendrán carreras grandes, incluso el Latino. El caballo se queda aquí. Estuvo parado unos tres meses, volvió y se recuperó perfecto. Afortunadamente los veterinarios, los peones lo han cuidado muy bien, de manera que no se lesionara, que ese es el otro problema, que se lo fuerce y se daña. Aquí todo lo contrario”.

Uno mete un comentario sobre lo alejado de la punta que corre Natan –un poco insidioso, sabiendo los puntos que calza Giannetti- y Bautista responde: “Adrián sabe qué hacer con el caballo, es un maestro; Dany y él manejan el tema y así quedamos”. Una buena política para que el naranja y azul siga brillando.     

El cuento de hadas de RdI no es cuento, ni siquiera cuando la titular de una yunta tiene problemas y "el muleto" le gana un Grupo 1

 

Adrián Giannetti se lució en las riendas de la hija de Agnes Gold / Gza. Revista Palermo

Neverwalkalone superó a su compañera No Fear en el Estrellas Juvenile Fillies, por dos cuerpos; la pupila de Carlos Daniel Etchechoury, hermana materna de Hacksaw Ridge y Justify My Love, venía de las condicionales y ayer tuvo un desarrollo limpio

El cuento de hadas de Stud RdI no es cuento. Nadie en San Isidro, el viernes 23, se sorprendió al ver a las dos potrancas de la yunta brasileña acortar distancia como poseídas y definir el Gran Premio Estrellas Juvenile Fillies-Copa Dr. Pedro C. Blaquier con Neverwalkalone primera por dos cuerpos ante su compañera No Fear, dos hijas del padrillo icónico de la casa, el ya desaparecido Agnes Gold. Tercera, a un cuerpo y medio, Elvitas (Cosmic Trigger), de gran carrera tras correr en la punta con ritmo tranquilo.

  Nada inesperado lo de las yeguas que condujeron Adrián Giannnetti y Francisco Fernandes Gonçalves, pero sí asombroso. Venían nen el fondo del grupo al dejart el codo, a unos ocho cuerpo, y mientras Neverwalkalone cargó abierta y libre, No Fear encontró algo de tráfico y tuvo que esquivar a Carmen La Linda (Daddy Long Legs), incluso dando un saltito. Cuestiones de las carreras.

  Paulo Borges, que maneja RdI en la Argentina, no intentó explicar el resultado o porqué la ganadora de una prueba común en la arena pesada superó a una ganadora de Grupo 1: “Todos preguntaban cómo estábamos, incluso desde Brasil, y la respuesta era siempre la misma, ‘estamos 10 puntos, es una carrera muy difícil’, como decía Daniel,  ‘el baile es duro’, pero tenemos los jockeys que queríamos, los trabajos fueron buenos, las partidas finales también y la verdad es que yo no podía decir cuál estaría delante de la otra.

-¿No fear tuvo algún problema en el desarrollo?

-No lo sé, yo estaba gritando desde temprano. Las dos tienen chapa para ganar, ninguna iba a ser sorpresa. Siempre bromeo con Giannetti porque un día me va a matar y le digo ‘por favor, un poquito más apurado’ (ríe con ganas). Pero hablando en serio,  creo que la carrera se hizo muy lenta para lo que nos hubiera gustado a nosotros y el  final fue digno de ver.

-La realidad es que los que veíamos de afuera le dábamos más chance a No Fear.

-Estudiando la carrera, era una ganadora de Grupo 1 contra otra que había corrido solo dos veces, que perdió en el debut en una distancia que no era para ella (1200 m), después ganó en el barro (una carrera que fue trasladada a la arena, en San Isidro). Para nosotros, que las vemos todos los días, No Fear no era una fija. Como criadores es bárbaro tener dos potrancas de Grupo 1 en la generación.

-A la madre, Zafira (Redattore), la conocemos.

-Está en Bagé; también es la madre de Justify My Love (Agnes Gold), que está en Estados Unidos y de Hacksaw Ridge (Dubai Dust), que la tenemos acá. Y tenemos acá un hermano de ellas, que se está criando para la próxima temporada.

  Justify My Love ganó el Clásico Omega y Hacksaw Ridge, el GP Jorge de Atucha (G 1).

  Sigue Paulo: “Le pedí a Gilberto Sayago que viniera para disfrutar lo que yo estoy disfrutan en la Argentina hace algunos años. No sé si hay muchos acontecimientos en el mundo como Carrera de las Estrellas, y tener cinco caballos en este festival entre 15 que hay en la caballeriza es fantástico. También vino Paulo Bergamo, el veterinario de Fazenda Mondesir que es donde tenemos la cría en Brasil.

   Emocionado, Borges confesó sus sensaciones por este momento: “No quiero que pase esta ola nunca más, espero seguir surfeando, porque sabemos lo difícil que es, que no se sabe cuando se acaba y estamos trabajando para eso. Me emociono porque es obvio que uno trabaja para cruzar el disco adelante y los reconocimientos se convierten en un termómetro que tenemos para quedarnos tranquilos de que estamos haciendo las cosas bien. Estoy lejos de mi familia, por más cerca que sea no es mi país pero uno no se siente extranjero aquí”.

"Pensé que nunca iba a volver a ganar en Royal Ascot", confesó ayer Frankie Dettori, durante su larga despedida como jockey

Después de tres segundos puestos el martes, primer día del festival de la corona británica, el jockey más famoso del mundo pudo ganar hoy con el favorito Gregory, en el Queen's Vase (G 2), con lo que suma 78 victorias en la serie, que continuará jueves, viernes y sábado

Gregory gana el Queen's Vase, un alivio para el jockey ítalo-británico / Megan Ridgwell

 

Es una fiesta Royal Ascot, vaya novedad. Los mejores caballos británicos, algunos muy buenos del resto de Europa, los entrenadores célebres en el Reino Unido, los propietarios más fuertes y los jockeys, Lanfranco Dettori que se despide del festival real después de 33 años; Ryan Moore, el líder, jinete del grupo Coolmore lo que es decir Aidan O’Brien, devenido el entrenador más ganador aquí, con 83 victorias, una cifra que alcanzó en el primer día del meeting, gracias a Paddington (Siyouni), ganador del St James’s Palace Stakes (G 1 – 1600 m de codo) y River Tiber (Wootton Bassett), el potrillo de 2 años que se llevó el Coventry Stakes (G 2-1200 m). Ambos con los colores de Michael Tabor, uno de los socios de Magnier, Smith y cía.

Dettori es el jockey de todos, no hay quien no lo quiera ver ganar y su triunfo de hoy en el Queen’s Vase (G 2-2850 m-para caballos de 3 años) fue saludado por el público con vítores, aplausos y gritos, cuando regresaba a un círculo de ganadores rodeado de una multitud como nunca en los dos días que van de la serie. Después, el salto del ángel desde la montura de Gregory (Golden Horn y Gretchen, por Galileo), invicto ahora en tres actuaciones.

“Quiero retirarme en lo más alto”, había dicho el ítalo-británico en este largamente anunciado retiro que algún medio denominó “tour de despedida” e incluyó una escala en California, donde compitió en la reciente temporada de Santa Anita con éxito. Y ayer, Frankie confesó que su triunfo fue un alivio por los tres segundos puestos que había cosechado el martes, cuando percibió que estaba en falta con los aficionados de todo el mundo que lo quieren.

En el St James’s Palace, por ejemplo, su caballo, Chaldean (Frankel), que le había dado al jockey la victoria en las 2000 Guineas (G 1-2000 m) inglesas, quedó segundo a tres cuerpos y ¾ de Paddington, ganador de las 2000 Guineas de Irlanda, después de correr en la punta. “Es probable que Frankie sintiera que apuró temprano la carrera”, dijo Andrew Balding,  entrenador de Chaldean. Y agregó: “Pero no estoy seguro de que eso haya sido decisivo en el resultado. Son dos caballos de gran nivel”.

Dettori comentó ayer tras su 78° éxito en Royal Ascot: “Pensé que nunca iba a ganar este año, que será el último aquí. Cuando vi que se acercaba Oisin Murphy –con Saint George- pensé ‘no, otra vez segundo no’. Estoy contento y triste a la vez. Voy a disfrutar de mi familia, a la que el hipódromo invitó hoy para estar en un palco, por lo que me alegro de haber ganado frente a ellos”.

A los jockeys estrella locales, Mickael Barzalona, la jocketa Hollie Doyle -ya ganó en Royal Ascot 2023-, William Buick, Tom Marquand, se suman al encuentro de cinco días de clásicos en el hipódromo cercano a Londres grandes de los Estados Unidos, como Javier Castellano, ganador este año del Kentucky Derby y el Belmont; John Velazquez, dueño del Preakness y  ayer ganador del Queen Mary (G 2), con la potranca Crimson Advocate, y Joel Rosario, entre otros.

Todos nombres sensacionales, pero la figura de estos días es Frankie Dettori, como viene ocurriendo desde hace dos décadas, por lo menos. Le quedan al gran látigo tres jornadas intensas para seguir disfrutando de Royal Ascot. Y para el público también.  

  

Conseguir el récord de triunfos en un año, el objetivo que persigue Francisco Leandro para bajar un cambio y disfrutar de la familia

Con el trofeo del General Belgrano, luego de otra faena de Gonçalves / Gza. Prensa Palermo

 

Luego de la sensacional victoria de Treasure Island en el Clásico General Belgrano (G 2), el sábado en Palermo, y las siete carreras ganadas el viernes en San Isidro, el jockey brasileño reconoció que piensa en los récords como objetivo, para dedicarle más tiempo a la familia

Pocos minutos después de ganar una carrera como el Clásico General Belgrano (G 2-2500m) por la cabeza, en un espectacular desenlace en el que Treasure Island (Treasure Beach) doblegó al notable Camus Superior (Vástago Salvaje), en Palermo, Francisco Fernandes Gonçalves tenía la mente fresca para analizarla y hablar del futuro, el suyo y el del caballo de la caballeriza Bien de Abajo, de azul.

“He tenido un fin de semana soñado, a pesar de que hoy veníamos mal, ganamos la más importante. Estoy contento por el presente, por las carreras de ayer –viernes, en San Isidro- y por lo que está por venir”, dispara de entrada, contento por la conquista en sí y por haber salvado la malaria de una reunión en la que no había podido ganar hasta allí, cosa que a nadie puede sorprender.

-¡Qué  final!

-Son dos caballos muy guapos,  muy buenos. Yo sabía qué caballo tenía; ha superado todos los cambios, de la milla a 2500 metros en poco tiempo, mérito del equipo que ha hecho un gran trabajo.

-Para Nico Martín Ferro fue un cambio natural, por genética.

-Sí, pero además hay que saber que, cuando vino al stud de Nico, Treasure Island era muy nervioso y ahora está demostrando el gran caballo que es, porque superó también el problema de su carácter.

Gonçalves tuvo algo que ver en la aventura de correr en mayor distancia. Él es parte de aquel equipo que menciona. “Yo lo montaba, daba la pasada y me gustaba, vimos que tenía con qué ir a la distancia y por suerte no nos equivocamos, le queda mucho por hacer”.

Francisco Leandro, como tantísimos jockeys, sabe más de un caballo que lo que podría imaginarse, no se ciñe sólo a lo que corre el ejemplar, por eso opina que Treasure Island podría volver al césped sin problemas: “Por ser hijo de Treasure Beach y nieto de Galileo tiene todo para correr en pasto, por más que ganó sus mejores carreras en la arena de Palermo”.

Sobre el gran viernes en San Isidro, con siete victorias, recuerda que “ya había ganado siete una o dos veces [fueron dos, le aseguramos, una en Cidade Jardim, San Pablo], pero este fue un día soñado como profesional, estoy más cerca de igualar el récord de Falero y Baratucci (ocho victorias), pero bueno, hay que esperar. Ojalá que vuelva a ganar siete porque es difícil ganar una y llegar a siete u ocho en un día, ni hablar”.

Gonçalves reconoce que el objetivo es alcanzar el récord de triunfos en una temporada, que mantiene Jorge Ricardo, otro brasileño, con 467. Cuando aún no se llegó a la mitad del año, Leandrinho suma 293; 2022 fue hasta ahora su ejercicio más productivo, con 420. “Ojalá que la salud me ayude y siga teniendo el apoyo de la gente, con buenos caballos”, pide.

-Y la familia feliz (le dice uno que quiere verlo siempre en una pista, pero no a cualquier costo).

-Sí, espero lograr esta meta para disfrutar más tiempo en casa, la familia se necesita. Correr todos los días, Palermo, San Isidro y La Plata es mucha obligación.

   Ayer domingo, por lo pronto, Francisco dejó libres todos sus compromisos en la reunión de La Plata. El necesario reposo del guerrero que le piden su hijo Iván, y Talita su mujer, embarazada de una niña, que va a ser lo mejor del año.